Análisis Gears of War: Judgment

Un Unreal Engine 3 exprimido

'Gears of War: Judgment' hace uso de un más que trabajado Unreal Engine 3 y que ya vimos muy depurado en la tercera parte. Con alguna que otra mejora por aquí y por allá, el resultado es francamente espectacular. Más de un escenario nos ha dejado con la boca abierta, como la luz incide en varias superficies o resalta el fuego de las armas en las zonas más oscuras como pasillos. Además se añaden efectos resultones muy de modo últimamente como la suciedad en pantalla, algo que ya hemos visto en otros juegos como 'Battlefield 3' o 'Crysis 3'.

Ya mencionado en el apartado jugable, los escenarios nos llevarán a recorrer búnkeres, calles de Halvo Bay o playas al más puro estilo desembarco de Normandía entre otras. Todas lucen increíblemente bien gracias al motor, pero podrían haber ahondado más en cuando su disposición pues no tardaremos en darnos cuenta de que estaremos una y otra vez ante pasillos; aunque tampoco es de extrañar sabiendo que la principal propuesta del producto es la de ofrecernos un shooter 110% marca de la casa.

Los personajes lucen francamente bien, la sincronización labial raras veces falla, algo que si ocurría en sus antecesores, y las animaciones aunque no siguen siendo el culmen, cumplen lo esperado. Mencionar que la IA nos ha jugado alguna que otra mala pasada. Los Locust no siguen un patrón de comportamiento la mar de inteligente la verdad, y no es de extrañar que tres o cuatro enemigos se nos planten con todos sus morros delante nuestra; hemos encontrado pequeños fallos puntuales donde algunos personajes se quedaban mirando al infinito durante un par de segundos, nada que empañe por completo la experiencia. Por su parte la IA de los aliados se limita a lo básico: disparar a diestro y siniestro y a resucitarnos cuando caemos en combate.

El apartado sonoro tiene sus más y sus menos. La banda sonora se aleja del componente épico escuchado en otros títulos; atrás quedaron los cantos y tambores de la segunda entrega y que nos ponían los pelos de punta  en más de una ocasión. Esta vez el componente musical se limita a pasar desapercibido, temas cañeros que se limitan a acompañar a la acción.

Los llamados FX son caso aparte. Si el Unreal Engine 3 ha quedado exprimido con 'Gears of War: Judgment', jugarlo con un 5.1 se presenta casi obligatorio. 'Dead Space 3' junto al título de Epic y People Can Fly son lo más brutal que escucharéis hasta el momento en 2013. La contundencia de las armas, los rugidos de los Locust unido a su voz de ultratumba o las explosiones de granadas y morteros os dejarán sin aliento. En definitiva, indescriptible el ambiente que genera el tener un impecable apartado sonoro en este aspecto. Por su parte las voces rayan lo aceptable, nada de alardes, tampoco es la intención del título. Tacos y algún que otro chiste esporádico es lo que escucharéis a lo largo de la campaña.