Análisis Ninja Gaiden 3

¿Un ninja venido a menos?

Sin duda donde Ninja Gaiden siempre se ha hecho notar, donde ha tenido "chicha" ha sido en su apartado jugable. Técnica, paciencia y el conocer perfectamente a cada uno de nuestros adversarios han sido siempre las prioridades del jugador a la hora de controlar al ninja. Un título exigente donde los haya, comparable a lo que pueda ofrecer Bayonetta, salvando las distancias, claro está.

Habrá todo tipo de enemigos finales

Su dificultad ha sido siempre uno de los detalles que haga que ames a Ninja Gaiden o lo odies a más no poder aunque siempre volvía a picarte el gusanillo de volver a coger el pad por superar esa tediosa fase o acabar con ese enemigo final que tantos quebraderos de cabeza te ha dado. El motivo de esta "curiosa" adicción radica en la depurada jugabilidad donde el jugador sentía su constante mejoría a lo largo de la aventura y como comentaba al principio del análisis "si te matan a menudo no es por culpa del juego, sino de tu habilidad".

Con la marcha de Itakagi de Team Ninja, el estudio ha optado por dar algo más de facilidad al usuario nuevo, detalle que sin duda puede echar para atrás a los "masoquistas" de los dos anteriores juegos. Al igual que pueda ocurrir con el apartado del argumento, la jugabilidad ha ido enfocada a esos posibles usuarios que nunca se hayan puesto el traje de Ninja y quieran dar el paso con esta entrega.

Pero ¿hasta donde ha visto Ninja Gaiden 3 rebajada su dificultad? A nada que tengamos un poco de soltura con lo ya publicado en este tipo de títulos el nivel normal supondrá un paseo donde tan solo los jefes finales serán una piedra en el camino. El nivel dificil igual plantea un reto algo mayor, aunque donde de verdad los fans de la saga se sientan como en casa sea es en la dificultad posterior a dificil y que realmente consigue esos momentos de "desesperación sana". Para los nuevos pupilos os recomendamos empezar en Heroe (Facil) y poco a poco ir subiendo en dificultad ya que en normal puede seros algo complicado de primeras.

Dispondremos de nuevos movimientos

Otro de los aspectos que ha caracterizado siempre a la franquicia ha sido la posibilidad de ir cambiando de arma en mitad del combate y con ello adaptarnos a los enemigos que nos vayan saliendo al paso. En esta ocasión dispondremos unicamente de la katana como arma principal, además del arco y los kunai; lo cual simplifica mucho los enfrentamientos ya que desde el principio contamos con todos los tipos de combos. Unido a esta reducción del armamento, será tan solo uno el ataque Ninpo que podremos llevar a cabo y que utilizaremos una vez tengamos recargada la barra de Ki (cosa no muy dificil) a medida que asestemos golpes. Este poder hará que Ryu se transforme en un gigantesco dragón de fuego que engulla, literalmente, a sus enemigos. Por si fuera poco, una vez finalice la escena de video de dicho ataque, nuestra barra de vida se regenerá por completo.

La técnica a la hora de realizar los diferentes combos será algo más "machaca-botones" que lo ya jugado, atrás quedaron el conocer a la perfección cada uno de los ataques para salir indemne de una oleada de enemigos; aquí serán utiles, aunque casi siempre acabaremos tirando de dos o tres, dejando el resto a un lado.

Son muchas las facilidades que se han dado al jugador durante las diferentes fases, a parte de las mencionada arriba; encontraremos aguilas repartidas por el escenario que servirán para guardar el progreso, nuestra salud se regenerará cuando termina una ronda de enemigos o aprovechar la maldición que padecemos para realizar un poderoso ataque cuando nuestro brazo se ponga rojo, consiguiendo que acabemos con varios enemigos de una sola vez. Aun con estos pequeños "peros" el combate de Ninja Gaiden 3 sigue siendo tan adictivo como antes y jugarlo en niveles altos de dificultad es una delicia.

Durante nuestro periplo por los diferentes parajes que nos va ofreciendo el título alrededor del mundo para acabar con los Señores de la Alquimia, encontraremos espectaculares secuencias cinemáticas que iran acompañadas de momentos Quick Time Events (QTE), algo muy común ultimamente en gran cantidad de juegos, indiferentemente de su género. Si bien algunos de estos QTE nos ofrecerán la posibilidad de añadir algo de tensión mientras chocamos espada contra espada en un combate o esquivamos misiles en el aire; crearán momentos impagables durante algunas fases de los jefes finales, pero no dejan de ser un detalle más que justifica la casualización que ha sufrido el título en pos de satisfacer a un mayor número de usuarios. Además también podremos emplear según el momento nuestras dotes de sigilo para pillar a los enemigos in-fraganti, correr por las paredes etcétera.

Centrándonos en el tipo de adversarios encontraremos desde soldados que usarán bazookas, escudos blindados, diferentes tipos de ninjas que disponen incluso de habilidades mágicas, pasando hasta por seres mutados geneticamente que se convertirán en huesos duros de roer, en definitiva una notable variedad de personajes y donde tendremos que tener en cuenta como enfrentarnos a ellos.

La duración de Ninja Gaiden 3 variará según el nivel de dificultad en el que lo juguemos y nuestra pericia, la primera ronda en normal nos ha llevado entre 5 y 6 horas, mientras que en dificil se ha visto ampliada a 8; por su parte el modo más dificil amplia la duración del juego dado el desafío que plantea. No es que sea un juego largo, pero la implementación del multijugador, alarga la vida del título.