Impresiones
Por mucho que nos habíamos hecho a la idea de que el juego había enfocado dicho género como uno de sus nuevos pilares, uno no se hace a la idea de lo que significa ésto hasta que tiene el título ante sí, ya que de lo que uno espera ver, ligerísimas pinceladas roleras a lo The Legend of Zelda, a lo que de verdad es, un título profundo y con multitud de opciones, hay un trecho, y uno muy grande.
Muerte tiene niveles de experiencia, gana xp en los combates, mejora al subir de nivel o tomar pócimas atributos como la salud, el ataque, la defensa, la probabilidad de ataques críticos, la bonificación por ataques críticos, lo arcano (la magia), la resistencia, las armas principales y las armas secundarias, gasta puntos de habilidad en árboles de poderes con múltiples ramificaciones, tiene capacidad para equiparse guadañas, armas secundarias, hombreras, armaduras, guanteletes, botas, talismanes y pociones que cambian su aspecto a la mínima modificación...
Una vez uno navega por el menú, queda sorprendido ante la profundidad del elemento y ante su presencia.
Además, no solo hay componentes de rol, como bien deciamos, el juego está enfocado cual título del género. Tendremos que elegir que elementos llevamos en el inventario, cuáles desechamos, cuáles vendemos, qué nos equipamos y para ello, casi siempre habituará a haber una especie de ciudad central en la que, además de poder hablar con todos los personajes (no muchos eso sí), podremos aceptar misiones principales y secundarias, comprar y vender armas/armaduras, entrenar para lograr nuevos movimientos o comprarlos... etc.
Cada vez que nos crucemos con un objeto se nos indicará su nombre, su tipo, el nivel que tiene (si es muy alto no lo podremos utilizar) y sus estadísticas comparadas con aquello que llevamos en su misma posición. Con ello se nos ofrecerá cogerlo y ponerlo en el inventario o directamente ponérnoslo. Y como hemos dicho, hay más armas legendarias y sets de armadura de los que uno puede imaginar viniendo de Darksiders, y cada modificación en nuestro atuendo tendrá su reflejo en el personaje.
Incluso los enemigos tienen una barra de vida sobre su cabeza y al luchar con ellos se nos muestra el daño que hacen y el que les hacemos.
Darksiders II llega a un punto tan hondo que ni siquiera nos dejará mejorar todo en una partida. Habitualmente llegaremos al final del juego al nivel 30, y con él ni siquiera completaremos un árbol de habilidades. Tampoco hay un arma de diez, o una armadura de diez, llega un punto en el que las diferencias entre uno u otro objeto dependerán única y exclusivamente de nuestro estilo de juego. ¿Preferimos corta o larga distancia? ¿Atacar o defender? ¿Regenerar vida o poder arcano?
Hay tanto y tantos materiales por coleccionar que hasta existirá un mercado vía online en el que podremos ofrecer e intercambiar objetos con gente de nuestra lista de amigos, para ayudarnos mutuamente y coleccionar los ítems que mejor se adaptan a nuestros gustos.
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