Análisis Horizon II: Forbidden West

Horizon Forbidden West

Análisis de Horizon Forbidden West

Tengo que reconocer que nunca he sido muy dado a los exclusivos de PlayStation. No es que no terminase de ser fan de la marca, ya que he tenido todas las consolas que han lanzado al mercado, desde la primera gris y más fina que una fiambrera hasta la enorme PlayStation 5 que requiere acompaña a mi televisor desde hace meses. 

Sin embargo, los juegos que decoraban mi estantería y me daban tantas horas de diversión no eran  los propios de Sony. Yo era más de Digimon Rumble Arena, los Harry Potter, Atlantis, Tarzán, entre otros tantos que me gustaban porque pasaban del VHS a la consola. Diablos, tenía hasta un juego de Micro Machine antes que el Gran Turismo. 

Tengo que decir que aquí también existen las excepciones, ya que Spyro, Ratchet, Sly y Jak eran juegos que no dejaban descansar a mis primeras consolas. De hecho, recuerdo una demo de Ratchet que duraba un par de horas hasta expirar y a la que dedicaba todo ese tiempo a esperar Metrópolis y Aguasnegras. Todo ello antes de tener la trilogía completa con su disco. 

Aloy me hizo amar las sagas de PlayStation

La historia continúa de una forma que ya os podréis imaginar, ya que la desaparición de la mayoría de estos nombres hizo que Ratchet fuese la única que me vinculase a Sony, dando con ello pie a que PlayStation 3 fuese una época algo oscura. 

Sin embargo, en 2016 decidí dar el salto. Una semana antes de que se anunciase PS4 Pro (dichosa mi suerte), me lancé a la compra de una PlayStation 4 que incluía Uncharted 4. Ya tenía Batman Arkham Knight comprado con antelación, por lo que no le hice mucho caso a Nathan Drake durante meses. 

Esta podría haber sido una historia similar a la vivida con PlayStation 3, pero ocurrió algo que hizo click en mí en 2017. No pudo ser de lanzamiento por diversas circunstancias, pero durante ese verano vi Horizon Zero Dawn de oferta. Ya había completado varios de los juegos que tenía pendiente y me dije a mí mismo de darle una oportunidad. Y eso cambió mi vida. Al menos con los videojuegos. 

Fueron horas  y horas las que estuve enganchado a la consola. Los días se fueron convirtiendo en semanas de una forma que pocas veces había sentido. Horizon Zero Dawn tenía un argumento que atrapaba, pero sobre todo, un mundo que requería más de mi atención.  Y todo esto dio lugar a que mi historia cambiase. 

Actualmente mi colección de PlayStation 4 supera los 40 juegos, siendo gran partes de estos sus exclusivos. Decidí empezar Uncharted tras acabar Horizon. Completé God of War hasta vencer a todas las Valquirias. Viví el dolor de Ellie en The Last of Us Parte 2. Lanzé miles de telarañas mientras recorría Nueva York. Y todo esto sin mencionar que este encuentro me hizo a animarme a probar otras sagas como Resident Evil y Final Fantasy. 

Horizon Zero Dawn me hizo el jugador que soy hoy en día. Me hizo salir de mi zona de confort para darme cuenta de que había más mundos maravillosos que me estaba perdiendo.

Sé que me he alargado demasiado en esta introducción, pero ya que no he podido estar en su semana de lanzamiento, quería aprovechar este análisis para compartir con vosotros mi experiencia, la forma que tiene un videojuego para cambiarnos. Por todo ello, y aunque sea un poco fuera de tiempo, cuando muchos ya lo habréis jugado, no puedo sentirme más afortunado de ser el redactor de JuegosADN que se encarga de analizar Horizon: Forbidden West, la ansiada secuela del título que me cambió la vida.

Horizon Forbidden West

Salvar al mundo de la destrucción

Dejando a un lado mis sentimientos, es hora de contaros qué es lo que tiene que ofrecer Horizon Forbidden West, siendo este un título, que, ante todo, nos narra una historia continuista en el más estricto sentido de la palabra. No por la poca ambición que presenta, la cual ya os adelanto que, salvo por su ritmo acelerado al final, cuenta con unos giros de guion que me han dejado boquiabiertos. 

Por el contrario, hago uso de este término porque Horizon Forbidden West es una secuela que comienza nada más acabar la primera entrega. Sin entrar demasiado en el terreno de los spoilers, debo resumir la premisa del título en que lo que hicimos en la primera entrega de poco sirvió, ya que conseguimos frenar el caos de HADES, pero solo para ralentizarlo. 

De esta forma, Horizon Forbidden West nos cuenta como Aloy debe viajar a una nueva zona no vista en el anterior título con el objetivo de encontrar la solución a una plaga que está acabando con el mundo. El cómo lo hace y si logra conseguirlo o no es algo que tendréis que descubrir por vosotros mismos, ya que es aquí donde radica el mayor potencial del título: la sorpresa. 

Eso sí, como mencionaba un par de párrafo más arriba, debo mencionar que el único problema que le encuentro a la historia es un tutorial extremadamente largo y el ritmo en sus compases finales, ya que da la sensación de que en Guerrilla Games se dieron cuenta de que se estaban excediendo y tenían que acabar la historia cuanto antes. Pese a ello, puedo decir que el título cuenta con un final que dejará satisfecho tanto a nuevos como viejos jugadores de la saga.

Horizon Forbidden West

Un vasto y vertical mundo

Entrando ya en términos de mundo, hay que señalar que Horizon Forbidden West cuenta con uno de los mejores mundos abiertos de los últimos años, contando ya no solo con una gran extensión lleno de diferentes elementos repartidos por toda las zonas, sino que, además, han añadido la verticalidad de una forma mucho más orgánica que en la anterior entrega. 

En ese sentido, el título cuenta con mejoras en la exploración al usar diferentes elementos y habilidades, tales como el gancho, el parapente, entre otras tantas que ya no solo permiten llegar antes y mejor a lugares ya conocidos, sino que, además, permite un backtracking con el que seguir descubriendo secretos en zonas en las que incluso ya hemos conseguido el que pensábamos que era el 100%. 

Si acaso el único punto a tener en cuenta es que el título no termina de diferenciar los elementos con los que podemos interaccionar y con los que no, haciendo con ello que muchas veces nos liemos sobre el camino a seguir en contraposición al correcto, lo que también da lugar a que exista cierta linealidad que choca con la libertad. 

Pese a ello, no se le puede negar al título que consigue atraparte por completo hasta el punto de que en muchas ocasiones he llegado a dejar de lado la misión principal o secundaria que estaba realizando para aventurarme en alguna zona con detalles que me eran desconocidos hasta ese momento. 

Horizon Forbidden West

Toda tipo de misiones que completar

De hecho, ya que menciono a las misiones que presenta el título, tengo que decir que al inicio el contenido del que disponemos abruma bastante. Apenas había llegado a la Intimidación cuando vi todo lo que podía hacer y ni siquiera sabía por donde empezar. De hecho, al principio las primeras misiones secundarias las encontré de casualidad. 

No obstante, una vez le coges el punto a esta gran aventura, todo es ágil y mucho más accesible, ya que solo requiere de un período de adaptación en el cual se termina entrando en bucle hasta el punto de no querer parar. Esto también da lugar a que exista un sentimiento de querer completarlo todo que sin duda es una satisfacción a jugadores que, como yo, van con la idea de sacarse el Platino de este juego. 

De la misma forma, hay que señalar que existe una gran diferencia entre misiones secundarias y principales, ya no solo por la carga argumental que suponen, sino que aquí también entran en juego el peso de las cinematicas en estas últimas frente a las secundarias, que se limitan en muchos casos a diálogos que reciclan animaciones. 

Sea como fuere, no hay que quitarle importancia a las misiones secundarias, ya que, entre una cosa y otra, ya sean carreras, terrenos de caza, cuellilargos, entre otros tanto, vais a querer investigar cada rincón en la búsqueda de nuevos retos, siendo algunos de estos incluso más complicados que los de la propia historia. 

Horizon Forbidden West

Las espectaculares máquinas

Por otro lado, no se puede pasar por alto el hecho de que Horizon se diferencia de otras sagas por su máquinas, contra las cuales tendremos que enfrentarnos. Y en esto hay que decir que si los de Zero Dawn ya eran espectaculares, en Horizon Forbidden West han sacado todo su potencial. 

De esta forma, con un combate continuista, pero mejorado, podemos ver como Aloy tendrá que usar diferentes recursos y armas para poder hacer frente a estas bestias, las cuales requieren ser escaneadas en todo momento ya no solo para conocer sus posibles patrones, sino porque esto da pie a que conozcamos sus puntos débiles. 

En cualquier caso, haciendo uso del trazado de luces, al menos en la versión de PlayStation 5, cada enfrentamiento con una máquina se convierte en todo un espectáculo visual que ofrece todas las delicias que sus criaturas pueden ofrecer,. sobre todo si tenemos en cuenta que ahora hay muchas más máquinas.

Asimismo, cada una de estas máquinas requiere de un aprendizaje para conocer la mejor forma de derrotarlas, ya que incluso podemos ver como las partes de estas caen, logrando así que podamos contrarrestarlas con sus propias armas. 

Horizon Forbidden West

Aloy crece contigo, pero sin callarse

A la hora de hablar de su protagonista, hay que decir que Aloy vuelve a ser un personaje entrañable, aunque habiendo sufrido ciertos cambios en su status, ya que, lejos de ser la paria que era en un origen, el mundo que le rodea ahora la trata como la gran heroína que es. 

Sin embargo, dejando su historia a un lado, hay que decir que el personaje irá creciendo según juguemos, ya no solo por la propia trama, sino también por un árbol de habilidades dividio en categorías y con el que podremos hacer que Aloy se haga más fuerte en los aspectos y elementos que nosotros decidamos, dándonos así una mayor libertad de adaptación. 

Eso sí, en contraprestación a esto último, toda esa libertad se ve coartada por una Aloy que no se calla ni debajo del agua, ya que el hecho de que en muchas ocasiones esté diciendo lo que tenemos que hacer le resta bastante a la exploración. Y una pista ocasional de vez en cuando está bien, sobre todo si andamos perdidos, pero continuamente cansa. 

Horizon Forbidden West

Un increíble apartado técnico

Dicho todo esto, hay que entrar en el plano técnico, destacando que, a falta de que lo actualicen, Horizon Forbidden West presenta diversas fallas técnicas incluso en sus cinemáticas. Sí que es cierto que la actualización 1.06 ha corregido gran parte de los errores, pero esas cinemáticas en las que de repente aparecen piedras que no habían terminado de cargarse chocan bastante. 

Quitando este punto, hay que decir que visualmente es espectacular, sacando a relucir el enorme potencial que ofrece las consolas, a la par que la banda sonora es de lo mejorcito a nivel ambiental para acompañarte durante todo el título, tanto en el mundo como en la propia historia. 

Por su parte, la dificultad depende de varios factores, como el nivel, las habilidades, las máquinas que enfrentemos, entre otros. Hay que decir que al inicio puede hacerse cuesta arriba, pero poco a poco vamos adquiriendo una adaptación. al mundo que, pese a desafiante, permite sobrellevarlo mejor.

Finalmente, en el terreno de la duración, hay que señalar que el título dista de durar esas más de 100 horas que afirmaba Guerrilla Games, pero solo para la historia principal os tendrán pegados a la consola durante 25-30 horas. Y todo esto sin contar un 100% que podría triplicar esta duración.

Horizon Forbidden West

¿Merece la pena Horizon Forbidden West?

No puedo negar que las expectativas con Horizon Forbidden West eran tan altas como las ganas que tenía de catarlo. De hecho, la razón por la cual he sudado para poder conseguir una PlayStation 5 era para poder disfrutar de este juego en su máxima gloria. 

Y debo decir que no solo ha cumplido con mis expectativas, sino que, además, las ha superado con creces, dándonos no solo uno de los mejores juegos del año, sino que también se corona como una de las mejores secuelas que jamás se ha hecho. 

En estos momentos es desconocido si Guerrilla Games continuará la saga o no, ya que, de momento, solo sabemos que hay un spin-off en desarrollo para PlayStation VR2. Sin embargo, pase lo que pase, Horizon Forbidden West pasará a la historia como una de las mayores obras de PlayStation, encumbrando a Aloy como la gran heroína que estaba destinada a ser desde que nació.