Análisis Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia

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Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia - Regreso a los orígenes

La saga Fire Emblem deja de lado las mecánicas que la llevaron a lo más alto en esta generación para traer de vuelta la jugabilidad original

Plataforma analizada: Nintendo 3DS
16/05/2017 18:26
A lo largo de estos años, Fire Emblem se ha caracterizado por ascender desde el más profundo abismo hasta convertirse en uno de los principales pilares de Nintendo, siendo ejemplo de ello el anuncio de cuatro nuevos títulos (cinco si contamos la dupla de Fire Emblem Warriors) a inicios del presente año. Con Fire Emblem Heroes llegó el primero y a éste le ha seguido la aventura protagonizada por Alm y Celica, remake del segundo título de la saga que llega con un aire renovado
Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia

Fire Emblem Echoes: Shadow of Valentia, regreso al origen

Pese a tener más de dos décadas a sus espaldas desde el lanzamiento de su primer título, Fire Emblem es una franquicia que ha conocido su máximo auge en los últimos años, algo que se inició con la llegada de 'Fire Emblem Awakening' a la actual portátil de Nintendo allá por 2012. A este le siguió 'Fire Emblem Fates', título que vino en forma de trilogía, las cuales nos contaban una misma historia desde tres puntos de vista diferente, algo habitual en títulos anteriores de la saga, pero que en esta ocasión se explotó y amplió de tal forma que los chicos de Intelligent Systems vieron la necesidad de sacar tres versiones de este.

Todo ello no ha hecho más que traer grandes beneficios para las arcas de Nintendo, consiguiendo a su vez que la base de fans aumente hasta niveles impensables. No obstante, los más veteranos han clamado por los sacrificios que han sido necesarios para conseguir esto, siendo las razones de las más variadas, desde las que hablan de historias más simples hasta los que critican un fanservice excesivo. Sea como fuere, parece que la compañía nipona ha escuchado a estos fans de forma que han querido matar dos pájaros de un tiro gracias a 'Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia', título que regresa a los orígenes de la saga y que además trae a una de las entregas que nunca llegaron a salir de Japón. Es por ello que ahora sólo queda preguntarse si ha conseguido su objetivo. Os resolvemos esa duda. 

Lo primero a tratar es que el título, como bien indica su nombre, nos lleva a la tierra de Valentia, donde la mitología y las deidades dividieron el continente en el pasado en dos reinos: Rigel y Zofia. Estos conforman las dos caras de una misma moneda, siendo opuestas tanto en la cultura, el gobierno, la religión, la economía, entre otros aspectos de la sociedad. Y como suele hacer habitual incluso en la vida real, las diferencias llevan al conflicto, el cual inicia cuando un golpe de Estado en Zofia provoca que el nuevo tirano se alíe con el emperador de Rigel. Este es el desencadenante para que el pueblo y parte de la nobleza zofiana alce las armas en contra de los traidores e invasores, siendo el punto de partida de los protagonistas. De por sí podríamos decir que se trata de una historia redonda, pero que presenta un gran defecto en forma de constante diálogos, los cuales hacen que la trama vaya más lenta de lo que debería.

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Dos reinos enfrentados por la traición y la ambición

No obstante, y al contrario que ocurre con otros título, en esta ocasión no nos encontramos a dos amigos aliados para enfrentar al mal junto, sino que, tanto Alm como Celica inician sus aventuras por separado y por motivos diferentes. Y de la misma forma, la diferencia no sólo radica en sus propósitos, sino también en sus propios aliados, estando conformado el grupo del Luchador principalmente por atacantes físicos, mientras que en el de la Vicaria priman las unidades mágicas. Es de esta forma como los chicos de Intelligent Systems consiguen que estas dos sendas no se vuelvan repetitivas, evitando causarle al jugador una sensación de dejavú. 

Por otro lado, y ya desde el punto de vista jugable, hay que mencionar que este título se caracteriza por contar con una mecánica única, ya que el formato episódico ha sido modificado de tal modo que ya no tenemos capítulos individuales que empiezan y acaban con una batalla, sino que, en su lugar, contamos con episodios que cumplen la función de arcos argumentales de tal forma que mientras estos duren tendremos que hacer frente a un determinado número de batallas de forma ordenada mientras recorrermos el mapa. Todo ello con el fin de alcanzar nuestro objetivo en esta sección de la historia.

Los combates se han vuelto minimalistas y dinámicos, permitiendo partidas rápidas con otro tipo de estrategia

Pero no penséis que con lo dicho se han reducido sustancialmente el número de desafíos y combates, ya que sólo para pasarnos la historia principal tendremos que superar más de cincuenta escenarios diferentes, los cuales cuentan con una gran traba en contraposición a la cuantía mencionada, y es que estos se han vuelto minimalistas, de tal forma que los combates contra más de 40 unidades enemigas se han reducido, todo ello a favor de un mayor dinamismo que nos permitan acabar en un tiempo decente, algo que ayuda a la hora de tener que reiniciar la partida en caso de muerte accidental y a la hora de hacer más estratégica cada pequeño movimiento, pero que deja de lado las estratagemas a gran escala.  Asimismo, hay que destacar que se nota la procedencia del título, ya que los mapas de las batallas son en su mayoría planos, sin mostrar demasiados elementos en pantalla, llegando al punto de ser terrenos clónicos uno de otros. 

Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia

La Rueda de Mila se convierte en una herramienta capaz de retroceder en el tiempo

En cuanto a los elementos que presentan nuestros personajes, el primero de ellos que tenemos que mencionar es la Rueda de Mila, una herramienta que os permitirá retroceder atrás en los turnos de una batalla, lo que podría evitaros más de un reinicio por un fallo absurdo que no hayáis visto venir. No obstante, tened en cuenta que esta herramienta no romperá todos los esquemas, ya que tendremos un limitado número de usos posibles, los cuales podremos ampliar encontrando las escasas piezas extras de la Rueda que hay en Valentia, por lo que usadla o no es una decisión que habrá que meditar, siendo que en la mayoría de los casos sería más conveniente un reinicio tras media hora de juego que perder un uso. 

Por otro lado, volvemos a contar con personajes que harán uso de todas las herramientas que estén a su alcance para poder hacer frente a los ejércitos enemigos. No obstante, han sufrido una serie de cambios, al contrario que ocurre con la mecánica de los combates por turnos manejando a las unidades, algo que se ha mantenido inalterable. En todo caso hemos visto un cambio fundamentalmente en dos aspectos. El primero de ello es la presencia de nuevas técnicas de combates, las cuales tendremos que desbloquear haciendo uso de determinadas armas e ítems, de forma que podamos darles a los enemigos con una mayor fuerza. Por otro lado, ni los hechizos ni las armas tendrán desgaste, pero tendrán inconvenientes de diversa índole, como puede ser el hecho de que no nos dejen equipar más de una o que el uso de la magia, sea blanca o negra, nos cueste una determinada cantidad de Puntos de Salud. 

El uso de armas y magias está limitado de diferentes formas

Por otro lado, hay que destacar que, además de los combates y el mapa de selección de objetivos, en esta entrega contamos con dos nuevos tipos de escenarios, cada uno de ellos con sus peculiaridades. El primero de ello son las mazmorras, zonas donde controlaremos a Alm y Celica en una vista desde tercera persona y que se introducen como la principal diferencia de este capítulo respecto a los demás. En su interior podremos investigar para buscar diferentes ítems o cumplir un determinado desafío, todo ello con la presencia de enemigos que nos atacarán si nos alcanzan, iniciando así una nueva batalla. De por sí es una mecánica que en princpio llegaba a prometer bastante, pero a la hora de la verdad no se ha notado lo suficientemente aprovechada como para convertirlo en un pilar del título. De esta forma, y pese a que la idea es buena frente a su ejecución, en la mayoría de los casos ha acabado siendo más un lugar donde subir de nivel que una zona que explorar de principio a fin. 

En segundo lugar, el otro escenario es el correspondiente a las zonas pobladas y castillos, donde podremos hablar con diferentes NPCs que nos ofrecerán información o nos pedirán cumplir ciertas misiones, todo ello desde un punto de vista al más puro estilo de novela gráfica, pudiendo incluso investigar las zonas para encontrar objetos. No obstante, volvemos a notar en este aspecto una falta de ambición ante una idea que podía haberse aprovechado mejor, principalmente por las misiones, las cuales en su mayoría no aportan demasiada complejidad al jugador. 

Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia

El título llega doblado al inglés en todos sus diálogos

Finalmente, desde el punto de vista técnico, no podemos más que quitarnos el sombrero ante lo hecho por Inteligent Systems, ofreciendo unos diseños muchos más cuidados que evocan a la fantasía medieval, sin olvidarnos de la banda sonora, la cual contiene temas que provocarán más de un escalofrío de emoción, sobre todo si tenemos en cuenta el contexto en los que suenan de fondo, por no olvidar que absolutamente todos los diálogos, por muy triviales que sean, vienen con un exquisito doblaje inglés. En cuanto a la dificultad, pese a ser un remake, no podemos olvidar que este Fire Emblem se lanza en pleno 2017, por lo que el Modo Casual se ha mantenido para aquellos que no quieran perder a sus unidades caídas, siendo en todo caso opcional. Eso sí, no por ello hay que pensar que está todo hecho, ya que hay batallas que requerirán de lo mejor de nosotros incluso cuando ni siquiera llevemos cinco horas de juegos, algo que se repetirá en más de una ocasión. 

En conclusión, 'Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia' es un título que viene directamente del siglo XX, ofreciendo tanto a veteranos como a usuarios más novatos el desafío que ha podido quedar mermado con las últimas entregas. De igual forma, se trata de un título que ha introducido "nuevas" mecánicas a fin de hacer que la saga evolucione en relación a los anteriores títulos, aunque estas ideas no han terminado de cuajar en su ejecución, pero todo ello lo compensa con una jugabilidad y una historia que hará que más de uno se encandile de AlmCelica y sus compañeros.

8.5

Lo mejor

Una vuelta a los orígenes de la saga

Batallas más dinámicas

Dos sendas diferenciadas

Lo peor

Demasiado diálogo

Las mazmorras no terminan de estar aprovechadas al 100%

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