Análisis FAST Racing Neo

Por ello, nada de este estudio nos sorprende, porque conocemos de lo que son capaces. Una vez más se han embarcado en el, por desgracia, poco tratado género de las carreras futuristas. Los títulos de este tipo no abundan en los últimos años, y ya han pasado años desde el lanzamiento de los últimos capítulos de franquicias como 'F-Zero' (2004) o 'Wipeout' (2012). Por tanto, existe un buen mercado de jugadores de títulos de velocidad futurista que no están siendo satisfechos por las principales licencias, así que 'FAST Racing Neo' está hecho para ellos.

Un juego con su propio estilo

Lo que hay que destacar de 'FAST Racing Neo', y esto ya pasaba con su primera entrega, así que podemos decirlo de la saga en general, es que se trata de una creación con su propia esencia. Obviamente, es evidente que para crear esta licencia los chicos de Shin'en Multimedia han sido inspirados o han analizado clásicos del género como los comentados con anterioridad, pero la sensación al jugarlo es completamente diferente. No estamos ante un clon de 'F-Zero' o 'Wipeout', estamos ante 'FAST Racing Neo', algo que considero totalmente necesario en un juego de un estudio independiente que quiere demostrar de lo que es capaz.

Creo sinceramente que gran parte del secreto de los títulos independientes que triunfan en la actualidad, por no decir todos, deben su éxito a una jugabilidad sencilla y directa. Es un poco como Wii, su jugabilidad y accesibilidad de dio el éxito. A 'Minecraft' el éxito le llego por la facilidad de construcción, se trata de apilar bloques como si de un LEGO se tratase. Uno más reciente, 'Rocket League', apenas se maneja con un stick y dos botones. Es decir, lo importante es la jugabilidad y que esta sea sencilla y divertida. Por suerte para Shin'en, este requisito lo cumplen a la perfección.

Ojo, esto no quiere decir que sean juegos fáciles o que, cuando profundizas, no pueda encontrarte un título con muchos más matices jugables, ya que todos los títulos citados anteriormente los tienen. 'FAST Racing Neo', en este sentido, hereda esta mecánica sencilla y fácil de captar, pero que permite desarrollar entorno a ella una mecánica más profunda. Hablamos del cambio de estado de las naves de carreras. En el anterior juego se cambia de blanco a negro, permitiendo que la nave interaccione, o no, con ciertos elementos del escenario.

Esta vez el cambio es del azul al anaranjado, aunque la mecánica es tremendamente similar, variando por supuesto el tipo de elementos con los que podremos interaccionar. Hay que decir que esta vez se han elegido dos colores vivos que, junto a una mayor luminosidad o efectos de partículas de la nave, y junto a una mayor resolución que aporta Wii U, permiten una distinción perfecta en cada momento de en qué fase se encuentra la nave. Esto en el anterior título, en ocasiones, era difícil de ver, ahora no.

También vemos un pequeño cambio jugable que, quizás, facilita un poco las cosas y le permite ser más accesible de cara a los nuevos jugadores. En el anterior título conseguíamos unas esperas en el escenario, con ellas rellenábamos una barra que nos permitía dos cosas: poder cambiar de estado la nave y realizar turbos. Si no disponías de suficiente carga, no podías cambiar de estado la nave, siendo mucho más lento o no pudiendo evitar el estrellarse durante un salto. En 'FAST Racing Neo' la barra y las esferas del escenario se han reservado exclusivamente para un turbo, ahora mucho más necesario para ganar, y el cambio de estado de la nave se podrá realizar siempre.

Por tanto, esta modificación en el sistema de turbos y en el cambio de naves es notorio, pero personalmente lo encuentro útil, el juego es mucho más divertido y frenético con este sistema, ya que ahora el gameplay incita a que el jugador cambie mucho más que antes el estado de su nave. Estaremos todo el rato cambiando para coger un turbo, un salto, esquivar un obstáculo, etc.

Circuitos con personalidad

Uno de los mejores elementos de este título o de esta secuela, son sus escenarios. Los de la primera parte ya nos gustaban, ya que tenían mucha personalidad, pero en sta ocasión el trabajo en los circuitos es muy gratificante. El poder correr en entornos totalmente diferentes, como un desierto, una selva, una pista helada o una estación espacial, es ciertamente una maravilla. Y mucho más si entendemos que cada uno de estos circuitos tiene algo único que afecta a la jugabilidad.

El juego tiene también algo de 'Star Wars Episodio I: Racer', que muchos recordamos de Nintendo 64, y creo que son los escenarios. Ver como muchos tienen obstáculos únicos y son muy diferentes. Por ejemplo, en algunos es la propia pista la que te pone esos obstáculos, como grandes aspas que giran y que te destrozan si chocas contra ellas. Pero en otras ocasiones, elementos externos y variables se interponen en tu camino: una criatura gigante que cruza la pista, un campo de asteroides, cascadas de agua, grandes llamas o simplemente una nevada en la pista.

Algunos de estos obstáculos varían dependiendo de la vuelta en la que estés, es decir, son "eventos dinámicos", y lo mejor es que esquivarlos depende directamente de la pericia del piloto, y no de coger uno u otro turbo. Las aspas que giran o los asteroides nos harán destrozar la nave, pero por ejemplo el hielo nos descontrolará la nave o el agua hará que se ralentice la velocidad. Esquivarlos y dominar la nave para no perder el control cuando nos topamos con estos elementos, es probablemente una de las mejores cosas del título. Y, como digo, cada escenario es diferente y tiene sus propias peculiaridades.

Otra de las mejores cosas del título es su aspecto. Obviamente no estamos ante el mayor portento gráfico que hayamos visto en la generación o en Wii U, pero gráficamente no decepcionará a nadie. Shin'en Multimedia ha demostrado nuevamente que técnicamente son muy habilidosos y, por encima, disponen de una dirección artística que sabe en cada momento hasta dónde pueden llegar y como conseguir el mejor aspecto. Del juego destacan los diseños de las naves, los efectos y la sensación fantástica de velocidad. Ese juego de luces y partículas es tremendamente adictivo. Los circuitos tampoco se quedan demasiado atrás, son verdaderamente espectaculares... Y repito que este título apenas lo han hecho 5 personas.

Pese a todo, el juego en ningún momento se resiente o pega bajones de fotogramas. Lo cierto es que funciona todo de forma suave, es muy sólido, y la sensación es que estamos jugando a un producto ya muy probado y trabajado en relación a la optimización. Si de todo esto tengo que destacar algo, me quedo con el renovado efecto de velocidad, como digo adictivo y fantástico verlo con la resolución de Wii U.

Carreras para todos

'FAST Racing Neo' incluirá varios modos de juego típicos en un juego de velocidad. Lamentablemente, y esto es lo peor del juego, quizás sepa a poco. Es comprensible que el estudio, teniendo los recurso que han tenido, no hayan podido llegar un poco más lejos en relación a la cantidad de contenido que ofrecer. Obviamente aquí el juego sale perdiendo con respecto a otros títulos de velocidad del mercado, pero no debemos olvidar a qué tipo de juego nos enfrentamos, pese a que pueda disfrazarse perfectamente de un título cuyo desarrollo tiene muchos más recursos.

De esta forma nos encontramos con un modo campeonato, con varios modos de dificultad, por supuesto. En este modo podremos realizar carreras en las cuatro copas del título, cada una de ellas formada por cuatro circuitos diferentes, Esto hace un total de 16 circuitos. Conforme vamos superando las copas, desbloquearemos la siguientes y los próximos niveles de dificultad. También encontraremos un modo time attack, muy útil para practicar en los circuitos. Por último en los modos locales, tenemos el modo Héroe, en donde la dificultad será extrema. En este modo no podremos romper la nave, sino estaremos fuera.

Para los que disfrutan de modos multijugador, tendremos un modo local a pantalla partida con hasta tres jugadores más - pudiendo añadir o quitar los contrincantes CPU, y también un modo on-line. Los usuarios podrán elegir competir con amigos o con todo el mundo, elegir una de las naves disponibles y, ya dentro de una sala, elegir uno de los tres escenarios propuestos. Dependiendo de las elecciones de los jugadores, y del azar, se juega en una pista o en otra. En este sentido, es bastante parecido a 'Mario Kart 8'. Nos hemos cruzado con algunos periodistas on-line, y la verdad es que no hemos tenido problemas de lag, etc.

Adictivo y divertido

Finalmente hay que comentar que estamos ante un juego realmente divertido, y eso es lo que finalmente importa. Nuevamente tenemos esa sensación agridulce, ya que el formato está bien, la jugabilidad es adictiva y divertida, pero notamos cierta falta de contenido. Notamos que faltan recursos y que, con ello, Shin'en Multimedia podría haber realizado un título mucho más completo. Probablemente no más divertido, ya que la idea que propone el estudio con 'FAST Racing Neo' es suficientemente buena, pero sí más profunda y extensa.

Realmente no se a qué espera Nintendo para ofrecer algo más de apoyo a Shin'en... Es cierto que actualmente les ayudan mucho en la promoción de sus juegos, realizan reportajes en los medios oficiales o colocan sus tráilers en las principales conferencias de la compañía, pero Shin'en Multimedia es un estudio que lleva años pidiendo a gritos un salto de calidad, y esto sólo lo puede ofrecer la llegada de recursos. Nintendo podría sacar provecho de ello.

Pero que nadie se aleje de este título, hablamos de un juego independiente y digital, que se vende a un precio muy justo por lo que ofrece. 15 euros nos costará este gran juego en eShop. Hemos hablado de diversión, de un gameplay adictivo y divertido, y de un trabajo técnico fantástico. Como ocurre con los buenos perfumes, la pena es que llega en un frasco muy pequeño... Pero el trabajo de Shin'en Multimedia es nuevamente fantástico, un juego que un fan del género de la velocidad futurista nunca debería perderse, al menos probarlo.

Mejora con creces, al menos eso pienso, lo que vimos en 'FAST Racing League' para Wii, ampliando un poco el concepto y modificando su jugabilidad con pequeños matices que lo hacen más accesible, pero también más interesante. Mención especial a los escenarios, perfectamente diseñados para el gameplay que encontramos en estas carreras de bólidos futuristas.