Tal día como hoy, un 21 de noviembre de 1998 Nintendo publicaba en Japón “The Legend of Zelda: Ocarina of Time ” para Nintendo 64. A Europa llegaría unas semanas después (el 11 de diciembre) y poco tardó en enamorar por completo a toda la comunidad de jugadores, convirtiéndose en uno de los juegos, que aún hoy, mantienen una esencia especial.
Era la primera aventura de Link ya en 3D, una apuesta arriesgada y rupturista con la saga, pero que realmente funcionaba. Para muchos que disfrutamos este título en Nintendo 64 era difícil imaginarse un juego tan completo y dinámico. Hoy los tiempos han cambiado pero el recuerdo de las horas frente a la consola jugando todavía perduran.
Punto de inflexión
Hay muchos que catalogan a Ocarina of Time como el mejor juego de toda la historia. En esto de los videojuegos los gustos influyen mucho y es difícil poner etiquetas de este tipo, pero no hay duda de que Ocarina of Time consiguió dejar marca en una generación entera.
Veinte años han pasado y sigue siendo uno de los juegos mejor valorados de toda la historia. Para muchos, Ocarina of Time fue el primer contacto con el enorme universo de The Legend of Zelda, y somos los mismos que hoy le deseamos un feliz veinte cumpleaños.





