El mundo equino de Red Dead Redemption

Para que Read Dead Redemption pudiera alcanzar su objetivo de recrear la frontera estadounidense de la manera más hermosa y verosímil, conseguir los caballos más perfectos posibles era una prioridad clave. Con el fin de obtener el nivel de realismo necesario, Rockstar ha tenido que recurrir a una combinación de investigación, exhaustivas sesiones de captura de movimientos, el motor RAGE de Rockstar, la tecnología Natural Motion de Euphoria y unas técnicas de animación facial que hasta entonces sólo se habían utilizado con personajes humanos. El resultado son los caballos más realistas, creíbles y hermosos que se hayan visto en un videojuego, unos animales tan gratos de contemplar como divertidos de montar.

En su condición de principal medio de transporte del juego y uno de los animales más significativos en todos los aspectos de la iconografía del oeste, los caballos debían moverse de manera realista en todos los contextos, tanto en los entornos domésticos (monturas o tiros de diligencias) como en la campiña, sobre terrenos más escarpados, como rocas, montañas o empinadas laderas. Debían desplazarse con elegancia y, al mismo tiempo, ofrecer transiciones fluidas de los pasos más pequeños y lentos a los movimientos más grandes y agresivos. En Red Dead Redemption puedes perseguir a un caballo salvaje y tratar de someterlo montándolo a pelo y agarrándolo por las crines. Movimientos grandes y agresivos como estos debían transmitir fuerza, rabia y miedo. Son animales salvajes y el juego debía tratarlos de ese modo. No escatimamos esfuerzos para crear animaciones para todos los personajes humanos, con el objeto de que interacciones tales como montar y desmontar de los caballos fueran lo más fluidas y naturales posibles. Asimismo, tuvimos que animar todas las posibles permutaciones del uso de armas a caballo. Todo esto ayudó a integrar a Marston y a los caballos en el mundo de manera perfecta. También veremos que Marston mima a su caballo con alguna que otra palmada en el cuello o en las ancas.

La última pieza del rompecabezas suponía llevar el aspecto físico y el detalle del animal a unas cotas nunca vistas en un juego, algo que nos exigió devanarnos un poco los sesos. Así se les ocurrió la idea de usar las mismas técnicas faciales que utilizamos con “normal maps” animados (un modo de iluminar de manera realista las protuberancias y hendiduras de las caras de los personajes humanos) para representar como es debido los músculos de los caballos en movimiento, o, para ser más concretos, sus ancas, su hocico, sus cuartos delanteros y su caja torácica. Los resultados se perciben al instante en el modo en que la grupa del animal se contrae y expande al galopar, o se flexiona para levantar todo su peso y el de su jinete cuando se encabrita. La recreación del sistema esquelético y muscular de un caballo es una tarea complicada que nos ha llevado años, pero los resultados finales son tan asombrosos que ha merecido sobradamente la pena. Son los enormes esfuerzos invertidos en los detalles más pequeños los que hacen de Red Dead Redemption un Western como nunca se ha visto en el mundo de los videojuegos.