Análisis Theatrhythm Final Fantasy

Con los auriculares puestos y el 3D activado

Si, muchas aportaciones a nivel jugable para aumentar su profundidad pero lo más importante aquí es saber lo que han hecho con su apartado principal: el sonoro.

Y es que si eres de aquellos afortunados que han crecido con la saga de la Square de antaño, disfrutarás de las melodías originales sin alteraciones instrumentales hasta que realmente las hubo con la mítica séptima entrega protagonizada por Cloud y compañía.

Piezas de auténtico arte que incluso a día de hoy llegan a lo más profundo del jugador reteniéndolas en la cabeza para tararearlas a cualquier hora del día. En la variedad está el gusto y no es casualidad que los tres tipos de fases por juego de la serie sean tan dispares ya que a la vez de ofrecer diversidad crean una atmósfera alrededor de cada entrega. 

Si bien es cierto que la elección de algunas melodías podría ser más acertada observamos el camino recorrido durante estos 25 años y la tendencia de la industria a la vez que esta crecía.

Elige un títul y...¡a disfrutar!

Por otro lado, el cariño depositado en el apartado sonoro ha dejado de lado el tema visual con unos personajes de papel muy resultones acordes al título del propio juego acompañados por unos sencillos escenarios tridimensionales en el mejor de los casos, como sucede en los niveles FMS. En ellos recorremos los mapas de cada capítulo encontrado elementos característicos de los mismos resultando curiosamente similares entre ellos hasta FF VII, punto de inflexión también en las fases EMS incluyendo parte de las escenas FMV grabadas para cada proyecto.

Los menús por su parte son muy bonitos, con un diseño donde predominan las formas redondeadas, todo tipo de colores y efectos diferenciando muy bien en qué opción nos encontramos, algo muy importante teniendo tantas posibilidades de juego.

Meses por delante

Y es que si hay algo que los desarrolladores han tenido en mente es sin duda el crear un producto longevo cobrando sentido subir de nivel a nuestro equipo. Personajes y melodías ocultas, diferentes modos de juego, galerías de audio y video…

El contenido nos llevará mucho tiempo desbloquearlo.

Más allá del modo principal y sus tres niveles de dificultad desbloqueables, encontramos el clásico Challenge Mode listo para batir nuestras marcas y el Chaos Shrine donde se nos ofrecen retos de varios temas, sin poder elegir la dificultad, y que podremos enviar y recibir también de nuestros amigos gracias a Streetpass. Con ellos precisamente jugaremos partidas locales lamentando por enésima vez la ausencia de un modo online para poder competir o al menos participar en un ranking mundial.

Si nos cruzamos con alguien compartiremos además nuestro perfil de jugador eligiendo nosotros su diseño (con estilos diferentes a conseguir) que muestra estadísticas de nuestra partida.

Por si todo esto nos pareciera escaso este FF nos ofrece una selección de temas descargables previo pago a 1€ la unidad que bien merecen la pena mucho de ellos y que muchos jugadores hubiesen deseado el haber sido incluido en el juego.