Análisis The Last Door

(Pc, Mac)

Estás en: JuegosAdn > PC > Análisis > The Last Door (PC, Mac)

Amor por el píxel

Drama, misterio y puzles, con jugabilidad añeja y pixelacos como puños

Plataforma analizada: PC
15/07/2013 12:00
Un amigo de juventud, una carta inesperada y una tétrica mansión que guarda un terrible secreto. Ingredientes más que suficientes para adentrarnos en una aventura gráfica de las de toda la vida, adornada con un apartado visual tan sorprendente como acertado. De la mano de The Game Kitchen, llega el misterio de 'The Last Door'.
The Last Door

Asomar la cabeza en el cada vez más competitivo mundo del videojuego no es tarea fácil. Son muchos los estudios noveles cargados de talento que esperan su oportunidad para brindar su trabajo el gran público, y aunque es bien cierto que todavía son demasiados los proyectos que se quedan por el camino, cabe reconocer que los desarrollos 100% independientes viven una segunda edad de oro gracias a iniciativas como Green Light o Kickstarter.

Buena muestra de ello es sin duda el curioso 'The Last Door', una aventura gráfica con un inconfundible sabor añejo y unos toques muy personales. Se trata además del primer juego desarrollado por The Game Kitchen, un estudio independiente afincado en Sevilla que ha logrado dar vida a su primer proyecto gracias a la financiación colectiva.

Siguiendo un formato episódico para ajustarse al presupuesto disponible, 'The Last Door' cuenta ya con dos capítulos plenamente jugables a través de su página web. El primero de ellos es totalmente gratuito, mientras que una pequeña contribución al proyecto abre las puertas a su continuación y de paso ayuda a dar vida a un tercer episodio ya en desarrollo. Y la verdad es que merece la pena.

Videte ne quis sciat

Los primeros compases de 'The Last Door' pueden definirse simplemente como impactantes. No entraremos en detalles para no arruinar esta pequeña pero brillante parte de la experiencia, pero sí podemos contar que el juego arranca de forma directa y metiéndonos de lleno en su intrigante historia. A falta de cualquier tipo de ayuda y sin que sepamos muy bien qué sucede, unos cuantos clics bastarán para dar pie a un suceso escalofriante que marcará el inicio de una trama oscura y que atrapa sin remedio. A partir de ahí, comienza el juego real.

Sin comerlo ni beberlo pasamos a encontrarnos con nuestro protagonista, Jeremy Dewitt. Un joven profesor de filosofía cuya vida en la Londres del siglo XIX se ve interrumpida por la llegada de una carta misteriosa escrita del puño y letra de un viejo amigo, Anthony Beechwood, y en cuyo interior se halla únicamente una frase: "Videte ne quis sciat". Cuatro palabras con un profundo significado para Dewitt, quien no durará en hacer las maletas y dirigirse presto al antiguo caserón en el que habita su antiguo compañero.

The Last Door

Sin embargo, nada más llegar salta a la vista que algo raro está pasando. Aún haciendo el esfuerzo de obviar el pequeño detalle de los cuervos devorando una especie de cadáver en el jardín trasero, se hace imposible no notar que la mansión, aparentemente desierta, destila misterio por los cuatro costados. El asunto huele a gato encerrado, o seguramente a algo más peligroso que un gato; y por si alguien lo dudaba, no nos iremos de allí sin saber lo que es.

Anterior
12 3
Siguiente1 de 3 páginas
8

Lo mejor

Jugabilidad clásica, sencilla y de calidad

Su apartado artístico, minimalista pero inspirado

La trama y la ambientación atrapan sin remedio

Genial banda sonora, con piezas muy destacables

Lo peor

Los diálogos podrían estar mejor aprovechados

La experiencia es corta y se hace aún más corta

Nos quedamos a medias, a falta de más episodios

¿Cómo analizamos?