Análisis Sonic y el Caballero Negro

Diversión

Puede que peque, al igual que su antecesor, de ser un juego algo repetitivo al principio pero que irá mejorando según vayamos pasando pantallas, con fases más largas y mayor dificultad.

La historia es algo simplona, pero no creo que nadie que adquiera este tipo de juegos espere encontrar una magistral historia que le tenga a expensas hasta el final, además el hilo conductor de la misma vuelve a realizarse, como en Los Anillos Secretos, por medio de imágenes estáticas animadas. Eso sí, uno de los mejores aspectos que tiene es su ambientación.

Creo que han conseguido integrar y fusionar muy bien el universo de Sonic, en principio chocante por aquello de animalitos y robots, con el mundo de la fantasía medieval.

De hecho, encontraremos muchos de los elementos clásicos de Sonic, pero adaptados a este mundo arturesco, por ejemplo, los rings serán hadas amarillas, los propulsores hadas de viento azules o los muelle míticos de Sonic, serán setas gigantes.

En general, considero que este Sonic cumple con las expectativas de diversión teniendo en cuenta claro, que como el buen vino, mejora con el tiempo.

Conclusión

Me gustaría volver a recalcar que no estamos ante un Sonic al uso, sino que se trata de un spin-off con un planteamiento muy distinto en cuanto a jugabilidad, pero igual de válido, de hecho, aunque a priori parezca extraño ver al erizo de SEGA con espada, estos experimentos aportan variedad al género.

Además, si Mario puede jugar mil deportes, o cambiar parte de su jugabilidad para llevar una manguera y limpiar una isla, ¿quién puede decirle a Sonic que no lleve espada?.

Por lo demás estamos ante un juego muy aconsejable. Visualmente de lo mejorcito que se ha visto en el catálogo de Wii y que cumple en cuanto a jugabilidad y diversión.

Eso sí, no es para nada aconsejable si eres un purista de los Sonic más clásico. En ese caso, ver al erizo con espada matando dragones, puede causarte serios traumas psicológicos.