Análisis Shrek: Felices para siempre

Jugabilidad

Es en este punto donde más brilla Shrek y donde más se marca el público a quien va dirigido. El desarrollo del juego puede completarse con un cooperativo a cuatro jugadores a la vez, algo que sin duda multiplica la diversión del título y que un servidor hecha mucho de menos en esta generación. Los controles y las posibilidades no buscan complicaciones innecesarias y desde un principio estaremos soltando mamporros contra calabazas, ratas, pueblerinos armados o brujas con muy mala baba. Cada personaje tiene un botón de ataque, que pulsado repetidas veces servirá para encadenar un combo (con alguna variante según la situación) y otro de ataque especial. Shrek usará sus puños y patadas (y algún salto y aplastamiento con su enorme barriga) y asustará con su gruñido. Fiona será diestra en la espada y aturdirá a los enemigos con su cuerno de guerra, Asno por su parte repartirá cabezazos, rodará por el escenario estilo break dance y su ataque especial será ponerse a cantar (sí, como lo oís) y finalmente Gato con Botas usará la espada y su mirada tierna para emocionar y distraer a sus rivales.

Cada personaje tiene además del ataque simple (botón A) y el especial (botón B) un super ataque que sólo se activa cuando encadenamos una serie de golpes sin que nos dañen (rellenando una barra al estilo Guitar Hero) y que activaremos con el botón X. Por último el botón Y o los gatillos servirán para ir cambiando de personaje al instante y en cualquier momento. Esta acción es vital para el desarrollo del juego, no sólo para cambiar de personaje cuando a uno le quede poca vida, el juego será una sucesión de puzzles y combates y será necesario ir empleando las distintas habilidades de cada uno para resolverlos. Con la fuerza de Shrek moveremos objetos y abriremos cofres grandes, Asno y su coz girará catapultas, golpeará la pared para que nos desplacemos en plataformas móviles, Gato trepará por las paredes y Fiona usará el fuego para encender antorchas, calderos o detonar dinamita. Lo mejor es que los puzzles están muy bien diseñados y nos obligarán a ir encadenando acciones de los distintos personajes en todo momento. Un ejemplo sería que Asno suelta una coz a un carruaje dejando caer un barril de gasolina que Shrek transportará hasta un montón de rocas y Fiona encenderá para despejar el camino. Ejemplos distintos encontraremos cientos y nos obligarán a darle al coco más de una vez. Tampoco esperéis grandes complicaciones pero si sois tan malos como yo siempre podréis echar mano de los tres ratoncitos ciegos, que te darán hasta tres consejos acompañando texto con imágen previo pago de una cantidad determinada de monedas. Y en eso consiste básicamente el desarrollo del título, resolver puzzles, conseguir monedas y restaurar la vida, bien al derrotar enemigos, golpear algunos elementos del escenario o encontrando cofres y tesoros ocultos. Durante los niveles tendremos momentos de sólo pelea donde varias oleadas de enemigos vendrán hacia nosotros con no muy buenas intenciones mientras desplegamos todo nuestro potencial. Lo mejor es que en esos momentos la música cambia por completo y suena un tema pop/rock al estilo Smashing Pumpkins, todo un puntazo del que nunca nos cansaremos. En algunos niveles el colofón final será enfrentarse a enemigos finales como el Flautista de Hamelín, con un aspecto mucho más siniestro del que recuerdo en los cuentos.

En cuanto al desarrollo de niveles nuestro cuartel general será la aldea ogro, cada vez más poblada a medida que vayamos restacando ogros cautivos y desde la que podremos acceder a los distintos niveles, acceder a todos los cofres o comprar mejoras para los personajes en la tienda. Muchos de los cofres repartidos por los niveles sólo serán accesibles cuando el personaje haya alcanzado una habilidad determinada, lo que invita a revisitarlos para lograr el 100% del juego, algo que en este tipo de propuestas se agradece. Como veréis Shrek: Felices Para Siempre es un juego sencillo, muy en la línea de los títulos del universo LEGO donde avanzar resolviendo puzzles y combatiendo sin demasiadas complicaciones. Lo mejor es que la propuesta es ideal para jugar en familia ya que los más pequeños disfrutarán como enanos con sus personajes y bromas favoritas y mientras nosotros podremos ayudarles a resolver los puzzles más difíciles. Un gran juego para todos los públicos.

Diversión

El juego no ofrece más que el modo historia y la posibilidad de rejugarlo con los personajes mejorados para acceder a los cofres que antes no podíamos abrir, así como descubrir todos los objetos ocultos escondidos por los escenarios (y de paso saciar el hambre de gofres de Asno). Es un título sencillo, con unos puzzles bien diseñados y la variedad suficiente para que no nos aburramos durante sus 8-10 horas, dependiendo de si buscamos todo o vamos directos a la acción. El juego no es nada difícil y no podemos elegir su nivel de dificultad pero nos entretendrá y sin duda hará las delicias de los más peques de la casa, además de hacernos pasar un buen rato compartiéndolo con otros 3 jugadores a la vez. El punto negro es la ausencia total de modo online para compartir la experiencia con varios jugadores, sólo posible desde la misma consola. Si salvamos esto nos encontramos con todo un entretenimiento para este verano.

Sonido

Contaremos con algunas piezas extraídas de la banda sonora original de la película, compuestas por el genial Harry Gregson-Williams, habitual en la saga Shrek y conocido por otros trabajos como Las Crónicas de Narnia, El Reino de los Cielos, Deja-vu o la reciente El Príncipe de Persia, aunque los más jugones le conocerán por su gran trabajo en el terreno del videojuego poniendo sonido a Modern Warfare o la saga Metal Gear Solid. Casi nada. Durante los combates se escucharán temas de artistas como Lionel Richie o The Beastie Boys, muy acorde con la línea que viene acompañando a la saga desde sus inicios. Las voces de los personajes vienen en castellano y en algunos casos se mantienen las originales de las películas. No entendemos por qué algunas se han perdido como la del Gato con Botas (genial Antonio Banderas en su papel). Por suerte la de Gengi, la galleta de Gengibre, o la de Pinoccio, suenan tan bien como siempre. Un buen apartado que logra mantener el buen nivel exhibido por el juego en general.

Conclusión

Shrek: Felices para Siempre es tu juego si tienes niños, echas de menos los cooperativos a cuatro jugadores en la misma pantalla, si te gusta el universo del ogro o no quieres complicarte con una dificultad sencilla y sin muchas complicaciones. El título consigue lo que se propone y cada uno de sus apartados mantiene un buen nivel para dar como resultado un producto recomendable, más aún con la escased de propuestas durante este verano. Personalmente me ha sorprendido porque esperaba mucho menos y los chicos de Activision han conseguido que destierre, por el momento, ese mantra que siempre acompaña a todas las adaptaciones de películas al videojuego, que sería malo con ganas. No es ningún sobresaliente, pero en cuanto termine este texto volveré a coger el mando a ver si consigo esos últimos cofres, hace tiempo que no me divertía con algo tan simple.