Análisis Ristar

La historia de Ristar es sencilla como la mayoría de los plataformas 2D de la época, en un sistema solar lejano un pirata del espacio llamado Greedy lo conquista y esclaviza a los habitantes de todos los planetas, que asustados envían una señal, un mensaje para que el héroe, Ristar, la estrella, los salve a lo largo de seis planetas distintos con tres fases cada uno.

Ristar acude a la llamada, nuestro simpático protagonista es una estrella con piernas y unos largos brazos con los que sujeta a sus enemigos para después estamparlos contra él y generalmente acabar con ellos, estos brazos también los utiliza para colgarse de ramas, palancas, nadar más rápido, y tumbar árboles para poder pasar.

La mecánica de juego es sencilla, pero cumple a la perfección, Ristar no puede saltar muy alto pero con sus brazos puede llegar más alto colgándose de todos los lugares posibles, camina lento, pero en momentos puntuales aparecen unas barras en las que Ristar puede dar vueltas de 360 grados hasta en el momento justo hacerlo salir despedido (tendremos que manejarlo en e aire) y conseguir ítems especiales o fases de bonus, Ristar al contrario que Sonic es un juego más para pararse y pensar qué hacer (buscar un objeto oculto, una salida), que para ir a toda velocidad esquivando obstáculos.

Gráficamente es un juego muy vistoso, colorista, con variedad de fondos en los diferentes planetas que visitamos, enemigos de gran tamaño y aceptables efectos de luz y agua, destaca lo bien animado que está nuestro protagonista, con constantes y simpáticos guiños al jugador, todo un punto fuerte a su favor.

La música acompaña perfectamente al juego, con unos temas acordes al momento del juego, las hay amenas y alegres, de suspense etc., el sonido FX en cambio no me ha convencido mucho, primero por escaso, aparte de los típicos "toques" cuando perdemos un punto de vida y algún que otro suspiro de Ristar cuando pierde vida hay poco más que mencionar.

También debemos decir que a pesar del sólido y variado diseño de los niveles, algunos de ellos laberínticos, son en ocasiones demasiado lineales y los caminos alternativos son escasos e insuficientes, aún así el diseño de los niveles (exceptuando algunos del final) es bueno, no puedo decir lo mismo de los jefes finales, pero afortunadamente rara vez nos costará superarlos pues son muy predecibles.

Las opciones del juego son simples pero muy útiles, podremos elegir el nivel de dificultad, repasar los temas musicales del juego (con una curiosa banda compuesta por pájaros) y escribir passwords para acceder directamente a la fase que queramos, aunque con el sistema de salvar de la CV no lo necesitaremos, aunque con ellos también podremos activar trucos especiales.

Una vez que nos hacemos con el control de "saltar, agarrar, salta, agarrar..." conseguiremos hacer combos con los que llegar a lugares en principio inaccesibles, o matar a muchos enemigos seguidos, o incluso desde el aire, la idea de matar "agarrando" a los enemigos es novedosa pues la mayoría de los plataformas de aquel momento se reducían a "saltar encima"; y de esta manera se abren muchas posibilidades.

En definitiva, un juego recomendable, sobre todo para los amantes de los plataformas 2D a la antigua usanza, éste es un juego de media duración, por no decir corto, ya que los jugadores avanzados superarán los primeros niveles sin dificultad y quizá al terminar se queden con ganas de más, aún así Ristar sin estar a la altura de los grandes, por ser un poco repetitivo, tiene muchas cualidades para hacernos pasar buenos momentos con el Wii-mote, un buen trabajo por parte del Sonic Team.