¿Qué PC necesito para jugar en 2015? (Calidad Ultra)

Reportaje

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24/04/2015 18:20
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El currante. Escogiendo GPU

Otro apartado en el que las opciones se reducen a dos. Intel no tiene nada que ofrecer en este sentido ya que sus productos actuales van dedicados al mercado mobile y este no tiene cabida ahora mismo. Nvidia y AMD son los referentes dentro del mercado de las unidades de proceso gráfico (GPU para los amigos). Empezamos por Nvidia y nos decantamos por la Titan X… Que no, que esta vale 1.200 euros y adiós presupuesto. Con lo que vale una GPU podemos montar un ordenador completo. Dependiendo de la CPU escogida, podemos variar los precios. Podemos apostar claramente por alguno de los diferentes modelos de la serie por GeForce GTX 970 con 4GB GDDR5. La GTX 980 se nos iría mucho del presupuesto. La opción más recomendada es la MSI GeForce GTX 970 Gaming 100 ME 4GB GDDR5 ('The Witcher 3' de regalo…) a 400 euros. La Gigabyte GeForce GTX 970 WindForce 3X OC 4GB GDDR5 es otra buena opción.

En AMD tenemos una gama más amplia de precios y modelos. Nvidia tiene la manía de mantener los precios por las nubes y las opciones escasean. Con AMD tenemos un abanico más amplio, tanto que hasta nos podríamos permitir el lujo de montar un X-fire. La opción más plausible a la hora de escoger una GPU de AMD para jugar en ultra, y sin pasar de los 1080p pese a que esté capacitada, es la Sapphire R9 290X Tri-X OC 4GB GDDR5 (395 Euros). Algo más barata y muy parecida en cuanto a prestaciones es la Asus Radeon R9 290X DirectCU II OC 4GB GDDR5 (357 euros). Son dos modelos Oceados de serie. Si no los queréis así podemos ir a por los modelos sin ocear y nos ahorramos 70 y 40 euros respectivamente. Gracias a Catalyst o a la aplicación AMD Fusion podemos meterles mano nosotros mismos. La serie R9 290 de AMD ha resultado ser muy competente.

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Ahora solo falta ver qué podrá conseguir la serie R9 3xx. Nvidia tiene entre sus manos un auténtico monstruo gracias al lanzamiento de la Titan X. La contrarrespuesta de AMD podría ser la rumoreada R9 390X con memoria HMB en sustitución de la GDDR5. Pero claro, el precio de esta monada puede ser casi tan prohibitivo con su homólogo en Nvidia. Si la más cara de AMD (Sapphire R9 295X2 8GB GDDR5) vale casi 770 euros, imaginaos la futurible. Ya os hemos ofrecido las mejores opciones dentro de AMD y de Nvidia. Dentro de AMD también podéis apostar por las R9 280, que están todos los modelos por debajo de los 300 euros. No sería justo dejarlas a un lado. En Nvidia, la GeForce GTX 960 podría ser otra opción válida. Algunos modelos de esta serie vienen con 'The Witcher 3' incluido también…

Los gestores. Memoria Ram y HDD

Vamos con dos de los componentes más importantes del PC. La memoria RAM y el HDD son dos partes fundamentales del equipo para el correcto funcionamiento y gestión de nuestro PC Gaming. Dentro del apartado de la memoria RAM la opción más recomendable en la actualidad es apostar por las del tipo DDR3. Se han convertido en un estándar con el paso de los años y, pese a la llegada de la DDR4, todavía tiene tirón. La DDR4, por otra parte, pese a mostrar un rendimiento superior tiene precios muy altos y exige que ciertas partes específicas para su compatibilidad. La CPU i7-5820 es compatible, pero su alto precio y la exigencia de componentes también caros hace que la descartemos. La DDR3 se antoja, por ende, en la elección más plausible. Dentro de este tipo, tenemos a nuestra disposición muchos modelos y como tenemos 1.000.200 euros podemos ir a por los de alta gama.

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En relación a la cantidad, viendo las exigencias de los juegos lo normal es apostar por 8GB o más. Entre 8GB y 16GB sería lo ideal, con la Kingston HyperX Fury Blue DDR3 1866MHz PC3-14900 como una opción más que notable. Un módulo de 8GB que rinde muy bien y que nos permitiría meter hasta un máximo de 32GB con 4 módulos si la placa base lo permite. El precio es de 67 euros. Otra opción sería la G.Skill Ripjaws X DDR3 2400 PC3-19200 8GB 2x4GB, que tiene el mismo precio y es más avanzada. El problema es que son dos módulos de 4GB y apostar por cuatro de estas limitaría el total a 16GB. Si queréis apostar por la DDR4, la opción más barata es la Kingston HyperX Fury DDR4 2133 PC4-17000 4GB, a 60 euros. No está nada mal una opción así para empezar a darle rodaje a las DDR4.

¿Y el HDD? Antes hemos comentado la opción del SSD como disco estándar. No obstante, los precios que se manejan para un SSD de mucha capacidad siguen siendo muy altos y podría no merecer la pena. Seguiremos con los HDD 3.5 SATA3 que siguen dando buen rendimiento. En este apartado tenemos al WD Purple 1TB SATA3 (69 Euros) o al WD Green 1TB SATA3 con un búfer de 64MB. Podemos ir poco más allá y apostar por un SSHD, un disco híbrido de la marca Seagate modelo Seagate SSHD 1TB SATA 3 (84 euros). Una opción híbrida SSD/HDD muy recomendable y que ofrece un rendimiento muy sobresaliente, casi cercano al SSD normal pero a un precio más bajo y con más capacidad.

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Placa base y Fuente de alimentación

Dependiendo del modelo de CPU escogido, tendremos que optar por una placa base concreta. En el caso de AMD tendremos que apostar por una Socket Am3+ y la opción más clara es la MSI 970 Gaming, con un precio de 110 euros. Gracias al precio que tienen las CPU de AMD, podemos tirar por una placa resultona y no escatimar en nada. Si no queremos gastar tanto, hay otras opciones como la Asrock 990FX Extreme3 (112 euros) o la Asus M5A97 EVO R2.0 (100 euros). Todas son buenas opciones para montarlas junto a la CPU de AMD seleccionada. Dependiendo de las preferencias y el dinero que queráis invertir, todas os ofrecerán un rendimiento acorde a las expectativas que tengáis. A la hora de escoger placa base para las CPU de Intel la cosa se complica bastante con uno de los modelos que os hemos comentado, la CPU i7 5820K.

Esta nos obligaría sí o sí a tirar por el modelo Gigabyte GA-X79-UD3, que tiene un precio de 189 euros. Es compatible con la DDR4 por cierto. El otro modelo es una burrada de casi 500 euros de precio que no merece la pena. Si nos fijamos en el otro modelo de CPU Intel comentado, por suerte el abanico de posibilidades es más amplio y, gracias a ello, mucho más barato. Para la CPU Intel Core i7-3770K 3.5Ghz podemos decantarnos por dos placas en concreto. Por un lado tenemos la Asus P8Z77-V LX, con un precio de 82 euros y que permite hasta un máximo de 32GB de memoria RAM. La segunda opción es algo más barata, ASRock B75 Pro3. El precio de esta placa es de 76 euros. Por el contrario, solo admite modelos DDR3 hasta los 1600. Por seis euros no vamos a ponernos tiquismiquis.

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Vamos a ir acabando ya con esto comentando las posibles fuentes de alimentación que podríamos adquirir. No queremos problemas con la posible falta de potencia en el equipo y por eso es mejor decantarse por fuentes entre los 700/1.000W de potencia. No hace falta dar muchas vueltas para elegir una fuente de alimentación. Siempre y cuando esta sea modular, cualquier modelo es bueno. Los ejemplos que os ofrecemos van a ser la Tacens Valeo V 900W 80 Plus Silver Modular, con un precio de 86 euros. Este modelo ofrece un rendimiento sobresaliente y encima posee un diseño ecológico. Además es bastante silenciosa, algo muy importante. El segundo modelo, también modular, es la AeroCool Templarius Imperator 750W 80 Plus Silver. Su precio es de 86 euros. Todo esto armado nos da para un PC Ultra.

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