Análisis Overwatch

(Pc, PS4, One)

Estás en: JuegosAdn > PC > Análisis > Overwatch (PC, PS4, Xbox One)

Overwatch: Blizzard cambia de registro

Blizzard nos transporta de sus particulares universos de epicidad a uno en el que los héroes y un apartado visual totalmente carismático son sus cartas de presentación

Plataforma analizada: Xbox One
26/05/2016 12:40
Han pasado varios meses e inclusive años desde que Blizzard nos sorprendiera con el anuncio de su nueva IP. El estudio americano, y que tan acostumbrado nos tenía al género de la estrategia y RPG con sus correspondientes variantes, realiza un cambio de registro en lo que a la fórmula jugable se refiere. Overwatch se convierte pues en el primer shooter de la empresa, apostando por una vertiente ya habitual en los últimos años de la compañía, la competitiva multijugador.
Overwatch

FPS a prueba de bombas

Han sido varios los millones de jugadores que han podido disfrutar de la beta de Overwatch. El producto final que nos encontramos a día de hoy en las tiendas difiere poco de lo visto recientemente en su fase beta; no obstante y como es comprensible se han realizado todo tipo de ajustes e implementado varias novedades de cara a sorprender al jugador en su versión final. Heartstone y Heroes of the storm han sido, por ejemplo, dos de los productos que han pasado por una larga fase beta dándonos la sensación de encontrarnos “ante el título final”, siendo el lanzamiento un mero proceso más de cara al juego.

Dicho lo cual, y comenzando ahora si nuestro análisis de Overwatch, el FPS de Blizzard viene caracterizado por una jugabilidad totalmente accesible, un buen puñado de personajes bien diferenciados entre sí y por supuesto manteniendo intacta la esencia de la compañía: fácil de jugar, difícil de dominar. Estas serán pues las claves de Overwatch, un título que no se aleja para nada de la fórmula empleada por el estudio en sus últimos productos, diferenciándose tan solo en la forma de acercar al jugador un formato competitivo.

La propuesta de Overwatch nos insta a seleccionar uno de los 21 personajes (cada uno con su propio rol en la partida) y cooperar a lo largo de breves pero intensas partidas multijugador. Los héroes son sin lugar a dudas los grandes protagonistas de la obra, ya sea por su estilo artístico o bien por su jugabilidad. Jugar con Tracer no será lo mismo que hacerlo con Winston, mismo caso para Mercy o D.VA. El abanico de variantes a la hora de adaptarnos no sólo a nuestro estilo de juego sino también a las diferentes situaciones de la partida será uno de los puntos claves de Overwatch, incitandonos a querer dominar el mayor número de personajes posible.

Imagen asociada al video 35166

Hemos hablado de Overwatch como un FPS, pero no hay que olvidar que el título bebe mucho del género MOBA, en especial por la distribución de escenario y las habilidades de los personajes. Cada uno de los héroes contará con sus propias “skills” que por supuesto tendrán un tiempo de reutilización. Dichas habilidades, como ya podréis imaginar, supondrán aguantar unos segundos más en el campo de batalla, anticiparnos al rival o mantener con vida al resto del equipo. Su utilización debe ser empleada con cabeza, siempre buscando el beneficio del grupo.

Por un competitivo sin jugadores solitarios

Es justo aquí donde Overwatch saca pecho. El juego nos incita a jugar cooperando con todos y cada uno de los miembros de nuestro equipo. De poco o nada servirá meternos en combate en solitario o buscar la acción individual. Tanto habilidades como roles de los personajes están pensados para dicha finalidad: cooperar y vencer.

Ya tenemos las bases de Overwatch, un FPS con toques MOBA, ágil, directo y alejándose de la vertiente competitiva habitual de los shooters de hoy en día. No obstante, y generalizando, ¿Qué nos incita a seguir jugando a un videojuego multijugador competitivo? Muchos diréis que la gloria por alcanzar grandes rangos o los extras. Lo cierto es que por ahora Overwatch se encuentra en tierra de nadie en ambos aspectos.

Aunque su futuro genere ciertas dudas, las bases de Overwatch son cuanto menos prometedoras

Por un lado Blizzard ha decidido posponer hasta el próximo mes de Junio la que sin duda será la gran promesa de Overwatch, su lado más competitivo y puro. Por otra parte, actualmente progresar en Overwatch se resume en obtener experiencia con la que subir de nivel y agenciarnos cajas de botín. Dichos útiles contendrán skins para los personajes, audios, poses, etc,... Un extra que aunque no está mal, carece del incentivo de otros títulos del género.

Overwatch

No menos importante son los modos de juego. En este caso Overwatch opta por una mecánica puramente shooter con modalidades de sobra conocidas por los seguidores del género. Aunque atemporales, vertientes como asalto, escolta o control, podrían haber contado con varias opciones adicionales para no transmitir sensación de monotonía a las pocas horas. Es aquí donde Overwatch comienza a flojear, es decir, nos encontramos con personajes extremadamente carismáticos y distintos entre sí pero que en su ejecución - y por ello nos referimos al contexto en el que son expuestos - nos dejan un sabor de “esto ya lo he jugado antes”.

Sin llegar a ser algo negativo queda por ver cómo Blizzard es capaz de seguir aportando savia nueva al producto sin que éste caiga en saco roto. El competitivo, nuevos modos de juego, o por qué no decirlo, un modo Historia el cual se presta sin lugar a dudas atendiendo al variopinto elenco de héroes y que Blizzard nos ha ido mostrando mes a mes con sus espectaculares personajes.

Cuando Blizzard conoció a Pixar

Si bien el apartado jugable puede dejar algunas dudas, todo lo contrario ocurre con el apartado visual y artístico. Blizzard vuelve a demostrar que son los reyes a la hora de crear personajes y universos desde cero. Overwatch es uno de esos juegos que, aunque suene mal decirlo, entra por los ojos.

Como ya hemos repetido en líneas anteriores los héroes cuentan con un espectacular diseño, más propio de una película de Pixar que de un videojuego. Sus expresiones, colorido y trabajado aspecto crean un producto totalmente diferenciado a otros títulos del género.

Overwatch

Mismo caso para los escenarios. Con un total de 12 mapas que nos llevarán a diferentes localizaciones, éstos cuentan con un elaborado diseño - que además impide la creación de puntos ideales para tramposos - tanto en su ejecución como por supuesto en lo visual.

En lo que el rendimiento se refiere, Blizzard ha hecho los deberes con Overwatch. En consolas encontramos un título que rinde a 1080p y 60FPS, mientras que en PC tenemos un juego que además de la ya habitual escalabilidad de la plataforma, obtiene un rendimiento más que notable en una amplia variedad de equipos. Overwatch es un juego que se disfruta con teclado y ratón en su versión para PC pero tampoco hay que desechar la opción de emplear el mando dado el buen mapeado de botones.

Overwatch es directo, adictivo y frenético; si tenéis un grupo de amigos con los que jugar es totalmente imprescindible

Por último, y en lo que respecta al apartado sonoro, nos encontramos con un doblaje sobresaliente en el que las voces encajan a la perfección con los diferentes héroes; unos correctos efectos de sonido y unas melodías que sin llegar a ser pegadizas no desentonan para nada.

¿El referente en su estilo?

¿Ha sucumbido Overwatch al hipe? Lo cierto es que el producto de Blizzard presenta muchos puntos a favor y que se traducen en una jugabilidad endiabladamente ágil y directa, aunando también un apartado visual único. No obstante, Overwatch no es perfecto y tiene por delante un largo camino por recorrer hasta demostrar que puede ser la nueva piedra angular en el estudio americano.

Imagen asociada al video 35116

Si tenéis un grupo de amigos con el que adentraros en Overwatch, adelante, no tengáis miedo de su propuesta. Hay que destacar que el título tiene un claro enfoque competitivo, ligado directamente con la rama cooperativa. En caso de no contar con un mínimo de compañeros para jugar a Overwatch puede que la obra pierda cierto encanto, no siendo suficiente el desbloquear skins u otro tipo de extras.

Sin llegar a ser el mejor de su género, o al menos el más completo, Overwatch es uno de esos productos que nos reportará diversión durante un buen puñado de horas garantizando cada euro invertido. Nos hubiera gustado contar con más modos de juego, una vertiente competitiva desde el comienzo o inclusive todo tipo de añadidos que ahondaran en el imponente trasfondo creado por Blizzard. Por ahora, Overwatch es una propuesta notable en el género, algo falta de contenido, pero que cumple con la meta inicial ideada por el estudio americano. Solo el tiempo dirá hasta dónde es capaz de llegar Overwatch.

8.5

Lo mejor

Espectacular apartado visual

Jugabilidad directa y frenética

Buen número y diseño de mapas

Los héroes, tan variados como carismáticos

Lo peor

Escaso en modo de juego

Los extras, que aunque están bien, podrían haber dado más de sí

La falta de incentivos, y otros elementos, hacen que caigamos rápido en la monotonía

¿Cómo analizamos?