(Ps3)
La trama que nos acerca el título no está exenta de sorpresas desafortunadas que levantarán a más de uno y con mucha demasía, las cejas. Más aún si la persona que juega es seguidora del manganime.
Durante el comienzo del juego nos muestran a Luffy y su tripulación en los peligrosos mares del Nuevo Mundo. Nada raro en un principio debido a que en la primera entrega de Pirate Warriors nos conducían hasta ese lugar. Pero algo raro ocurre muy rápidamente. Y es que los sucesos que debería seguir la trama han sido cambiados. Nada ocurre como debería desde el punto de vista de la historia original.
Podemos ver en seguida que lo que sucede en la historia ha sido mezclado con otros sucesos históricos del manganime, envolviéndonos en un torbellino confuso y sin sentido. Ver como ocurren sucesos del Grand-Line en el Nuevo Mundo y juntarlos a su vez con otros sucesos que debieron ocurrir ya en el pasado, hacen que sea todo, desde el punto de vista del seguidor de la serie, una montaña inesperada y a la vez confusa.
Pero no se queda todo ahí. Poco después la historia se hace eco de algo totalmente nuevo, una trama inventada especialmente para el título que prosigue con más sorpresas inesperadas y caóticas.
La historia, aunque compuesta de sucesos totalmente inventivos, tiene algunos puntos interesantes y divertidos que llaman la atención. Sin embargo, aunque el título apueste por una trama inédita, esta está compuesta por pedacitos de la serie, por lo que no deja de ser un popurrí, un puzle mareado y aliñado con algo de imaginación.
En general, el sentimiento que embarga este apartado es sin duda de decepción al ver que la trama no ruge con fuerza. Y que no sea nada fiel tampoco ayuda mucho. Aunque ello no quite que tenga unos puntos meramente disfrutables.
La jugabilidad en 'Pirate Warriors 2' llega a su máximo confort. El tacto que tiene Omega Force con el género hack'n'slash se nota y después de una primera entrega con una jugabilidad más que sobresaliente, ahora rozan el cielo depurándola y añadiendo algunas novedades.
La jugabilidad del título está orientada en una sola dirección. Dar guantazos y demás golpes sin parar hasta derrotar a los enemigos que se nos opongan. Hordas de millares de enemigos llegarán a nuestro encuentro para intentar eliminarnos y nosotros deberemos quitárnoslos de encima para poder avanzar y conseguir acabar con los jefes de la zona.
Los combates son exageradamente divertidos. Dependiendo del personaje al que controlemos podremos hacer una serie de ataques potencialmente demoledores además de poder combinarlos con las técnicas especiales del propio usuario. Técnicas que podremos activar pulsando R1 cuando la barra de energía esté en su cúspide. Pero ahí no queda la cosa.
También podremos combinar nuestros ataques con aliados haciendo que los combates se conviertan en una gigantesca carnicería la mar de divertida. Ver como derrotas a miles de enemigos en unos minutos llega a ser una gozada.
Lo mejor
Un sistema de combate excelente que hace las delicias del género Hack’n Slash.
Un para nada desmerecido plantel de 36 personajes jugables.
Grandes mapeados que ofrecen mucha libertad de movimiento.
Un modo de Desafíos ciertamente desafiante.
Lo peor
Una historia que no hay por donde cogerla.
La falta de variedad en todos sus modos jugables lo hace muy repetitivo.
Ralentizaciones bruscas en el modo multijugador.
Apartado sonoro altamente reciclado de su precuela.
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