Análisis Mighty Switch Force! 2

Un juego de altas temperaturas

A diferencia de su primera parte, esta vez no dispondremos de una pistola, ni Patricia irá vestida de policía. Ahora estará caracterizada de bombera, en el difícil trabajo de la extinción de incendios, y ha cambiado su pistola por una efectiva manguera.

WayForward no ha cambiado apenas la jugabilidad respecto al primero, exceptuando la manguera. Seguiremos teniendo que hacer uso de la sirena de Patricia para activar o desactivar las cajas a nuestra conveniencia.

Algunas cajas de colores nos permitirán combinaciones más complejas, y otras, que constituyen otra novedad, nos permitirán canalizar el agua en la dirección que deseemos.

La manguera servirá para eliminar enemigos pequeños, distraer a los grandes o atraerlos hacia una trampa, o incluso inflarlos de agua hasta hacerlos reventar (no debe ser una muerte muy agradable...)

A toda velocidad

El verdadero protagonista de esta saga es el gran diseño de fases, siempre dinámicas, con la posibilidad de superarlas a toda velocidad una vez dominemos la jugabilidad.

De hecho uno de los objetivos de cada una de sus 16 fases (llamadas incidentes) es superar un tiempo establecido, que según la fase nos costará esfuerzo, aunque os adelanto que al terminar el juego obtendréis un ítem que os facilitará la tarea.

También encontraremos bloques que podemos disolver a golpe de manguerazo, otros bloques que nos propulsarán hacia la dirección indicada, por lo que según avanzamos la complejidad y dificultad irá en aumento. El fuego será también protagonista en otros bloques que sólo podremos apagar por segundos, y utilizarlos brevemente hasta que vuelvan a arder.

Y si hablamos de dificultad, si buscamos un reto mayor que rescatar a las Hooligan Sisters y encontrar la salida (en forma de robot auto-propulsado), tendremos en cada fase la posibilidad de buscar el Bebé feo (lo entenderéis al verlo), cuyo rescate es siempre de lo más complicado de cada fase.