Reportaje
Continuamos en este breve repaso a la evolución de los juegos de PC y las máquinas de la época desde el año 2001 hasta el presente, el año 2014
Creo que no se puede empezar mejor el año y de paso un artículo, que mentando a uno de los juegos más queridos por los peceros españoles. De la mano de Rebel Act Studios, que por desgracia cerró sus puertas hace ya unos años, llegó 'Blade: The Edge of Darkness'. Antes de seguir, la gran mayoría de miembros del estudio crearon Mercury Steam, por lo que ese gran talento sigue con vida. Seguimos con 'The Edge of Darkness' y lo que supuso no solo para la industria española, también para las máquinas de la época. Con el 3D ya como máximo estándar, Rebel Act puso a disposición de los usuarios de PC una obra magna en todos los sentidos. Jugablemente brutal, visualmente espectacular y encima español, para que aprendan otros.
Claro que semejante juego pedía una máquina a las alturas de las circunstancias. El año anterior pudimos disfrutar de 'Deus EX' y este pide un PC más o menos de las mismas características. Quizás un pelín más allá en términos de velocidad de la CPU, pues exigía un Pentium II que rindiese a 400mhz de reloj, 64 MB de RAM, aceleradora 3D de 8MB compatible con Dx8 y un espacio de 750 megas en el disco duro. Esto para los mínimos, si por un casual queríamos ver la obra a tope, la cosa cambia bastante. Para empezar la CPU sube a un Pentium III 500 MHz, 128 MB de RAM, tarjeta de sonido 3D compatible, DirectSound3D/EAX y aceleradora 3D con 32 MB de RAM. Un auténtico monstruo comparable a los de hoy día en relación a la potencia necesitada por los títulos más punteros.
El 2002 fue un año cargado de grandes juegos a nivel técnico. Como es casi imposible quedarse con uno, vamos con todos aquellos que causaron una gran repercusión en compatibles. Se tuvo de todo y para todos con 'Mafia', 'Hitman 2', 'Unreal Tournament 2003', 'Jedi Outcast', 'Battlefield 1942', 'Grand Theft Auto 3', 'The Elder Scrolls III: Morrowind' o 'Neverwinter Nights'. Sin comentarios ante el año que tuvo ante sí el PC. Como tenemos que quedarnos con los máximos exponentes a nivel técnico, hay que decantarse por el título de Bethesda, seguido por la obra de Rockstar, que además se estrenaba en las 3D. Rockstar y Bethesda dieron un salto enorme con la creación de estas terceras entregas de sus sagas más emblemáticas. Tanto uno como otro ofrecían mundos abiertos de un tamaño colosal llenos de vida.
Bethesda con Morrowind pone a nuestra disposición un mundo de fantasía medieval donde los castillos, las criaturas fantásticas y diferentes razas pueden ser elegidas como personajes a controlar. No esta su única bondad, la libertad de movimiento y un potente editor de personajes lo elevaron a la categoría de juego del año. Por otra parte está GTA3, la ficticia ciudad de Liberty City, una apasionante historia de mafias y traiciones y total libertad de desplazamiento ya sea a pie o vehículo motorizado. Rockstar dio en el clavo. En cuanto a requisitos, os podéis imaginar lo que pedían claro. TES III: Morrowind pedía W98 como S.O., una CPU Pentium 3 a más de 500 Mhz o un AMD Ahtlon, tarjeta gráfica de 32 MB mínimo, 256 MB de RAM y un Giga de espacio en el disco duro. GTA III recomendaba para usarlo a máxima calidad una CPU Pentium III a 700 mhz, 128 MB de RAM y gráfica de 32 MB .
El asentamiento del PC como plataforma de juego ya es más que evidente tras ver la evolución sufrida a nivel de hardware y software. Los juegos se desmarcan de las consolas cada vez más, salvo con Xbox, con la que estaba ahí ahí. Este año llegó el que para muchos es una de las obras más espectaculares del estudio de Bioware. 'Star Wars: Los caballeros de la Antigua República'. Un magnífico RPG basado en el popular mundo ficticio de George Lucas donde podemos controlar a un Jedi creado desde cero como nos plazca. Lo primero que llama la atención del juego es sin duda su impresionante puesta en escena y fidelidad al universo.
El otro punto remarcable es, por supuesto, su factura técnica, con I.V.A del 21%. El PC que pedía la obra de Bioware se salía de la escala. Atrás quedan las CPU con frecuencia de reloj en megahercios para dar el salto a las Ghz y de paso a las GPU como las conocemos en la actualidad. Como requisitos recomendados, el juego pedía una CPU Intel o AMD superior al Ghz, tarjeta gráfica compatible con Open GL1.4 o Dx 9.0 ATI Radeon 9200 o Nvida Geforce 4, 512 MB de RAM y 4 GB de espacio en el disco duro. Esto ya iba cambiando el color de las cosas y el salto dado del 2002 al 03 fue más que patente. El PC se va desmarcando.
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