Análisis Killing Floor 2

Killing Floor 2: Diversión cooperativa para exprimir con amigos

Los acontecimientos de ‘Killing Floor 2’ tienen lugar tan solo un mes después de lo acontecido en la primera parte, la cual surgió como un mod del mítico ‘Unreal Tournament 2004’ para después ver su primera versión comercial en Windows durante 2009. Estamos ante un shooter con marcado carácter multijugador, si bien tendremos la opción de jugarlo offline si así lo preferimos. Con una ambientación que respira gore y ciencia ficción por los cuatro costados, nuestro objetivo en ‘Killing Floor 2’ no será otro que sobrevivir a distintas oleadas de enemigos (los terroríficos Zeds) en los doce mapas perfectamente diseñados y disponibles desde un primer momento. ¿Serás capaz de acabar con los brotes de estos extraños especímenes?

Tras superar el tutorial en la planta de entrenamiento, a través del cual recibiremos las nociones básicas tanto de los controles como de la dinámica de juego, recibiremos nuestro primer objeto cosmético junto a experiencia para mejorar nuestro personaje. De esta manera, se nos presentan dos de las claves del éxito de ‘Killing Floor 2’. Podremos elegir y subir el nivel de nuestro personaje entre 10 bien distintos: Berserker, Comando, Apoyo, Médico de campo, Experto en demolición, Pirómano, Pistolero, Tirador, Superviviente o SWAT; teniendo cada uno de ellos sus propias habilidades especiales y armas que transforman drásticamente la manera de jugar. Y es que la especialización que elijamos nos otorgará diversas bonificaciones pasivas, habilidades y configuración de armas.

Por otro lado están los disparatados y variados adornos con los que podremos caracterizar a nuestro personaje. Seremos capaces de equiparnos con hasta 3 accesorios diferentes entre los que encontraremos máscaras, auriculares, gafas, sombreros y un sinfín de artículos que harán casi imposible coincidir con otro personaje igual al nuestro. Ampliaremos nuestra colección de accesorios de forma aleatoria tras completar partidas, en cajas, intercambiando con amigos o comprándolos directamente a través de la tienda de ‘Killing Floor 2’.

Sobrevivir a toda cosa a las oleadas

Como decimos, el principal objetivo del juego es sobrevivir a la ingente cantidad de Zeds que se nos vendrán encima oleada tras oleada. Para ello, tendrá una enorme importancia (además de nuestros reflejos y puntería a la hora de disparar) el uso que hagamos de nuestro inventario y será vital familiarizarse pronto con él. Al principio de cada partida empezaremos con un arma principal específica de nuestra clase de personaje, una pistola de 9 mm , un cuchillo y granadas; y una vez superada cada oleada de Zeds tendremos la oportunidad de visitar al mercader.

Si seguimos rápidamente las indicaciones de las flechas podremos dar con el mercader y comprar (o vender) equipo, de tal forma que nuestras posibilidades de supervivencia se vean aumentadas. En este punto es aconsejable echar un vistazo a nuestro límite de carga ya que las armas más potentes requerirán mayor espacio, viéndonos obligados a deshacernos de algún objeto anterior.

Por último, nuestra mayor ventaja en mitad de la trifulca contras los Zeds será la posibilidad de curación. Podremos curarnos mediante el uso de jeringuillas en mitad del combate pero, eso sí, tras cada uso nos veremos obligados a esperar cierto tiempo hasta poder volver a utilizarla; por lo que elegir el momento adecuado será una de las claves de nuestro éxito. Si es importante saber cuándo curarnos, no lo es menos mantenernos unidos a nuestro grupo de amigos. Las distintas especializaciones de cada personaje funcionan con una sinergia que facilitará mucho las cosas. Hacerse el héroe y afrontar una gran oleada de enemigos de forma individual es casi un suicidio asegurado; por lo que la estrategia de luchar espalda con espalda será una sabia elección.

El trabajo en equipo, imprescindible

En cuanto a los modos de juego disponibles, lo cierto es que no destacan por su número aunque veremos que el planteamiento en sí del multijugador es lo suficientemente bueno como para mantenerse por sí solo. A parte del Tutorial ya mencionado, podremos jugar a ‘Killing Floor 2’ en solitario o bien a través de partidas en línea. El modo para un jugador, como es casi inevitable en un título enfocado para jugar con más gente, en seguida se torna soso y aburrido. La mecánica de juego es la misma: aguantar las sucesivas oleadas de Zeds, visitando al mercader entre medias, y eliminar finalmente a un jefe final bastante más poderoso; pero al vernos solos ante el peligro sin posibilidad de interactuar la experiencia pierde mucho.

Por otro lado, el modo multijugador nos ofrece una mayor sensación de peligro y emoción al aumentar el número de enemigos en pantalla y obligarnos a actuar como un verdadero equipo en busca de la supervivencia. Además, es la mejor manera de obtener experiencia y mejorar así nuestros personajes, por no decir que parece otro juego totalmente distinto si lo comparamos con la experiencia offline. Como novedad al componente multijugador, se ha implementado el modo Survival Versus: 12 jugadores distribuidos en dos equipos jugarán dos rondas. En la primera uno de los equipos controlará a los temibles Zeds frente a los humanos, cambiando los papeles en la segunda ronda. Al final, se puntuará los resultados obtenidos en ambos enfrentamientos y se decidirá qué equipo ha sido el vencedor teniendo en cuenta la puntuación global. Un buen aliciente fuera del modo de juego más tradicional, si bien se echa en falta algo más de variedad.

Por todo lo que nos ofrece este ‘Killing Floor 2’, podemos afirmar que estamos ante un buen título que gustará a los amantes de los shooter multijugador que busquen una experiencia quizás algo más oscura y gore de lo habitual. A pesar de que su modalidad offline se hace monótona a las pocas partidas, el componente multijugador ofrece una experiencia frenética y llena de espectáculo como pocas veces hemos visto. Pese a la gran carga gráfica al acumular decenas de enemigos en pantalla, el apartado visual de ‘Killing Floor 2’ luce a un buen nivel tanto en PC como en PlayStation 4. Además, se han introducido mejoras para PlayStation Pro como la optimización para televisores 4K, aumento de la tasa de imágenes por segundo y el uso de memoria extra para obtener mejores texturas.

Killing Floor no decepciona si buscas frenetismo multijugador

Uno de los mayores alicientes para pasar horas y horas, oleada tras oleada, compartiendo partidas con nuestros amigos, será la posibilidad de desbloquear nuevo contenido y subir a nuestro personaje de nivel. Son mecánicas muy utilizadas que ya hemos podido ver en otros títulos pero ‘Killing Floor 2’ sabe cogerlas y darle su propio enfoque, haciendo el resultado realmente eficaz.

Entonces, ¿merece la pena ‘Killing Floor 2’? Salvo que busquemos un juego con un contenido jugable enfocado para un jugador, la respuesta tiene que ser sí. El principal punto débil de ‘Killing Floor 2’ es la falta de contenido offline, y quizás un modo historia hubiera salvado esa papeleta, pero lo cierto es que desde su primera entrega estamos ante un juego enfocado al multijugador; y eso se nota. Todos aquellos que busquen un buen shooter multijugador que se aleje un poco de lo visto hasta el momento tienen en este ‘Killing Floor 2’ una buena oportunidad para pasar grandes momentos de diversión. Si os gusto la saga ‘Left 4 Dead’ o incluso disfrutasteis con los disparatados accesorios de ‘Dead Rising’, sin duda que el juego que hoy os traemos puede ser, y mucho, de vuestro agrado.