Incidente de la Sangre Corrupta: así fue la pandemia de World of Warcraft estudiada por los científicos

World of Warcraft

World of Warcraft es por méritos propios el MMO más importante de la historia. El juego de Blizzard ha sido capaz de atrapar sin remedio a los apasionados del género, pero también a aquellos que nunca se habían acercado a este tipo de títulos e incluso a los videojuegos. Músicos, artistas y actores han reconocido abiertamente su pasión por el universo online de Warcraft. No es para menos si tenemos en cuenta los momentazos que es capaz de dejar.

Uno de ellos y también de los más recordados está relacionado con una pandemia que asoló el mundo de Azeroth. Y es que las crisis sanitarias no son sólo cosa de la vida real, también pueden llegar a ocurrir en universos persistentes como WoW. Conocido como el Incidente de la Sangre Corrupta, la  pandemia duró una semana, tiempo más que suficiente para que se extendiera entre millones de jugadores de todo el mundo.

La pandemía tenía su origen en la mazmorra Zul'Gurub. El jefe final del lugar, Hakkar, realizaba un ataque altamente contagioso llamado Sangre Corrupta. Si eras dañado por el ataque, aún a pesar de creer haberte recuperado del mismo, al salir y sin saberlo estabas extendiendo el virus afectando a las estadísticas de los personajes de nivel más bajo.

El incidente de la Sangre Corrupta llamó poderosamente la atención de epidimiólogos alrededor de todo el mundo

Como ocurriría en una pandemia real, no fueron pocos los jugadores que abandonaron las ciudades principales con el fin de evitar el contagio, e incluso confinándose en zonas menos pobladas. Otros jugadores llegaron a abandonar World of Warcraft hasta que la pandemia hubiera terminado.

El impacto del evento fue tal que captó la atención de epidemiólogos que quisieron recoger datos para saber cómo reaccionarían las poblaciones humanas ante una posible pandemia de grandes proporciones. Y curiosamente, ya la estamos sufriendo con la COVID-19.

Varias universidades de todo el mundo se sumaron a la investigación. Una de ellas fue la Universidad Ben-Gurión del Néguev, en Israel. En un artículo que fue publicado para la revista Epidemiology compararon los brotes de Sangre Corrupta con los de SARS y gripe aviar. Catalogado por los epidimiólogos como fascinante, éstos no dudaron en solicitar a Blizzard todo tipo de datos referentes a las estadísticas de los jugadores y sus reacciones a la pandemia virtual. El estudio aseguró que todo fue un accidente debido a un glitch.