Kid Icarus: Uprising para 3DS

 Si bien es cierto que hubieramos deseado probar una nueva demostración jugable o ese prometedor modo online que ha provocado la existencia de un nuevo retraso, tampoco podemos quejarnos de lo ofrecido, 3 niveles, con diferentes dificultades (de fácil a difícil), en los que tras elegir una de las 8 armas que usará nuestro personaje (el arco, una espada, garras tanto para manos como pies, la palma de las manos, las manos en sí, un cañon o dos "órbitas" o "bolas" de enegía) se nos da un tiempo límite de 5 minutos para disfrutar de las características de este juego tan especial.

Todas las misiones tienen un principio similar, en el cielo, del que nos arrojamos a sobrevolar el nivel que posteriormente visitaremos a pie, en secuencias de vuelo de longevidad igual o superior a las fases en tierra, que consistirán en esquivar todo ataque enemigo, destruir al que se acerque en exceso o recoger algún objeto que salga por ahí. Posteriormente pasamos a visitar a pie los escenarios, generalmente lineales, que no da demasiadas oportunidades a la exploración a pesar de la existencia de salas que, de no visitar, nos dejarán sin recoger ciertas recompensas o vivir trampas de nuestros enemigos. Y para concluir, si nuestra habilidad nos proporciona tiempo suficiente como para llegar en los 5 minutos que se nos daban, vivimos intensos momentos, echando un mano a personajes aliados en apuros o combatiendo con espectaculares jefes finales.

Así teníamos, por ejemplo, el primer nivel, de dificultad fácil, que nos llevaba a volar por verdes paisajes contra enemigos que apenas parecían querer deternenos, sin perder ni un ápice de vida, para acabar en una ciudad que recorreríamos de lado a lado (apenas un pasillo que incluso impedía que volvieramos sobre nuestros pasos poniendo un muro invisible cada cierto tiempo) para acabar en el coliseo de esta combatiendo con Cerbero. Un combate en el que era vital aprender a correr, esquivar o disparar en movimiento, que nos complicaría las cosas hasta que lograramos llevar a buen puerto dicha estrategia.

U otra misión, de dificultad media, que nos ponía en un vuelo nocturno, en medio de una tormenta. Aquí contemplaríamos al cabo de un tiempo uno de los paisajes más hermosos que se han logrado hacer con las 3 dimensiones de la consola. Con la luna al fondo, teníamos una especia de desierto desolado, con una línea de visión enorme, en el que incluso se veía a varios ejércitos combatiendo en tierra, a miles de metros bajo nuestras alas. En esta demostración conoceríamos a uno de los misteriosos personajes secundarios del juego, que necesitaría de nuestra colaboración para acabar con los enemigos que lo asaltan. Lamentablemente la demo no terminada antes que el tiempo límite, quedándonos siempre a medias tras varias salas superadas con nuestro nuevo aliado.

El juego es rápido, directo e intuitivo. En unos segundos todo el que lo pruebe comprende su divertida mecánica, que nos lleva por todo tipo de lugares esquivando o luchando con nuestras armas, diferenciadas únicamente en potencia o candencia de fuego, elementos estrechamente relacionados (a más potencia menos cadencia) o los movimientos que se llevan a cabo en el cuerpo a cuerpo.

El juego no pretende ofrecer mucho más que diversión para todo aquel que tenga algo de tiempo para dedicarle, objetivo que logra, pero que puede llegar a cansar a la larga, o así nos lo ha parecido tras jugar las 3 demostraciones seguidas.