Análisis Hitman - Episodio 6 - Hokkaido

Hitman: la primera Temporada, llega a su fin

Dicen que todo lo bueno tiene un final, y Hitman no ha sido menos. Tras ofrecernos durante estos últimos meses varios capítulos descargables, que nos han llevado por varias partes del planeta para acabar con numerosos peligros, el Agente 47 se despide temporalmente y lo hace con el lanzamiento del Episodio VI, el cual nos lleva hasta un complejo hospitalario situado a las afueras de Hokkaido y en el que deberemos segar la vida de dos peligrosos agentes de Providence. Para ello, el Agente 47 deberá infiltrarse en este hospital de vanguardia y hacerse pasar por uno de los ricos pacientes que necesitan cuidados urgentes y que solo dispensa este  lugar alejado de toda moralidad y en el que esa palabra no significa absolutamente nada. El hospital Gama ha ce uso de cualquier técnica de curación que sea necesaria para satisfacer la demanda de sus exclusivos clientes y si eso significa trabajar con métodos poco ortodoxos, pues adelante. No obstante, la ortodoxia en persona acaba de traspasar sus fronteras…

Una vez que estamos dentro del hospital Gama veremos que nos encontramos en un lugar donde nuestros actos deben ser ejecutados con mucha precisión. Tened en cuenta que estamos en un hospital lleno de agentes de seguridad, cámaras de vigilancia y otro tipo de personal, como sanitario, mantenimiento, etc. El complejo es de máxima seguridad, lo cual significa que 47 tendrá que adentrarse completamente desnudo en esta nueva misión de Hitman. ¿Qué queremos decir con eso de "desnudo"? No se pueden llevar armas de inicio, aunque no es necesario a decir verdad ya que el entorno nos proporcionará todo lo necesario para salir airosos. Por supuesto, siempre podemos optar por esconder algo en un sitio concreto y cogerlo cuando creamos conveniente hacerlo. Eso sí, en caso de ir con armas es recomendable evitar a los de seguridad ya que nos cachearán en el caso de querer entrar en zonas de alta seguridad. Evidentemente, el disfraz y los objetos que no llamen la atención serán, más que nunca, nuestra mejor arma.

El hospital Gama, además de contar mucha seguridad, también es un complejo donde la más alta tecnología se da cita para crear un entorno que limitará nuestros movimientos. Para esta misión de Hitman, es recomendable estudiar bien el entorno y ver hasta dónde podemos llegar con nuestro primer disfraz. Nuestro primer paseo estará limitado a las zonas comunes de los pacientes y nuestra habitación; el resto estará inaccesible ya que hay instalados lectores en todas las puertas. La opción más clara es hacerse pasar por un miembro del personal (médico en este caso ya que es lo que tendremos más a mano) para poder tener libertad total de movimiento y poder explorar sin miedo a ser reconocido. El hospital Gama es un entorno muy ratonero, sin apenas grandes espacios y con muchas habitaciones. La exploración es un factor clave, más aún si cabe, en este nuevo episodio de Hitman ya que es un escenario con bastante profundidad arquitectónica, hay cuatro niveles de mapeado y con multitud de salas.

Erich Soders – Tengo el "corazón partío"

Una vez bien explorado el hospital Gama y estudiado las rutas, nuestro primer objetivo es el señor Erich Soders ex-agente de la Agencia y ahora un espía de Providence, es decir, un traidor en toda regla. Para desgracia del señor Soders, el cual sufre una rara enfermedad llamada Situs Inversus (órganos del revés), el karma ha jugado sus cartas y no están a su favor precisamente. El paciente requiere con urgencia un trasplante de corazón para evitar la muerte, lo cual juega a favor de nuestro protagonista. Al igual que los anteriores episodios, este ofrece también diversas Oportunidades de asesinatos y en este caso hemos optado por una bastante singular y que nos evitará contacto directo con el señor Soders, quien está altamente protegido en una de las salas más exclusivas de todo el complejo hospitalario. Por supuesto, hay más Oportunidades para acabar con este tipejo y muy recomendables de realizar. Vamos a ver en qué consiste esta misión en concreto.

Como ya hemos comentado, el señor Soders está pendiente de un trasplante de corazón y nuestro objetivo, como ya habréis imaginado, es hacernos con este músculo para evitar que llegue a su destino. Evidentemente, el corazón está protegido en las entrañas del hospital y para llegar hasta él necesitaremos de todo nuestro ingenio y de un poco de paciencia. En esta misión veremos claramente la profundidad del hospital y hasta qué punto debemos ser meticulosos con nuestras acciones. Lo más recomendable es hacerse pasar por un médico del hospital Gama y no llevar arma alguna, salvo quizás una llave inglesa para dejar inconsciente a algunos matasanos por el camino y así poder usar un disfraz más apropiado según la situación que se presente. Evidentemente no vamos a reventaros los pasos de la misión, por lo que solo diremos que una vez cumplidos algunos objetivos llegaremos hasta el corazón y nos desharemos de él destruyéndolo por completo. El señor Soders está muerto y sin acercarnos a él.

Yuki Yamazaki – Agente de Providence

El siguiente objetivo (podéis escoger el orden) es la señorita Yuki Yamazaki, agente de Providence y abogada de la Yakuza, o mafia japonesa. La letrada tiene que reunirse con el señor Soders para darle cierta información vital y, como ya imaginareis, nuestro objetivo es evitar que eso ocurra. Para ello, debemos acabar con la señorita Yamazaki aprovechando algunas de las Oportunidades que ofrece Hitman o haciendo uso de nuestras propias habilidades. Por desgracia, Yuki Yamazaki tiene más de una sombra y no será sencillo acercarse a ella sin ser descubierto y atacado por sus gorilas. Después de seis episodios, la sutileza y la suplantación de identidad se han convertido en una de nuestras mejores herramientas y deberemos usarlas para poder acabar con la vida de la joven japonesa. ¿Se os da bien el yoga? Al Agente 47 se le da de vicio, cosa que podremos comprobar en directo si apostamos por seguir esta Oportunidad concreta para acercarnos a la señorita Yamazaki.

Como ya hemos comentado, el hospital Gama posee varias zonas de recreo y una de ellas es un agradable baño termal mixto en el que los pacientes pueden pasar el rato para relajarse. Los baños termales tienen doble protagonismo, aunque en esta ocasión hemos decidido centrarnos en el yoga. La otra la dejamos para que la descubráis vosotros. Ahora bien, esta sala está llena de gente y la zona de las aguas termales, lugar de la acción, tiene muchos testigos presenciales y eso no es precisamente una buena idea. Lo primero que debemos hacer es echarlos de allí y para ello nada mejor que toquetear las tuberías del agua. Tras esto, la sala quedará desalojada y lista para ser testigos de una clase de yoga magistral. Ah, pero antes de entrar en materia es necesario buscar al profesor de yoga y cambiarnos de atuendo. Ahora sí, el Agente 47 está listo para dar la clase (es un experto) y enseñar a la señorita Yamazaki un movimiento nuevo: el salto del ángel… Con los dos objetivos muertos, se acabó la misión.

Clasicismo y modernidad se funden en un paraje nevado

Io Interactive ha demostrado con esta entrega que no se le da nada mal ofrecer entornos elaborados y que nos obliguen a recorrerlos de arriba hasta abajo para descubrir todas sus posibilidades jugables. Por supuesto, el recorrerlos también nos ha brindado el poder comprobar el trabajo realizado a nivel arquitectónico, visual y técnico. Desde París hasta la espectacular Sapienza (pueblo ficticio), pasando por la abarrotada Marrakech, la exótica Bangkok o el peligroso cuartel de colorado, Hitman nos ha ofrecido una variedad cuya guinda la pone el hospital Gama de la ciudad de Hokkaido. A nivel técnico seguimos encontrándonos con el mismo motor, el cual muestra un nivel de detalle idéntico al que estamos acostumbrados. En este aspecto, no hay cambios de especial relevancia. Donde sí veremos muchos cambios es el aspecto visual y artístico, donde el Episodio VI de Hitman ofrece una fusión de clasicismo japonés y alta tecnología que genera un gran contraste a la vista del jugador.

Todo ello viene adornado por un entorno nevado y situado en la alta montaña que dota al escenario de un aspecto único y embriagador. Es un escenario al que no le falta detalle alguno y que gustará a los jugadores que buscan algo más que un simple entorno abierto. ¿Es el broche de oro para la primera temporada de Hitman? El hospital Gama quizás no sea el mejor entorno creado hasta la fecha (ese honor pertenece a Sapienza), pero sí puede decir que es el más ratonero de todos y el que más a prueba nos pone a la hora de explorarlo, gracias sobre todo al hecho de limitar los accesos y obligarnos a buscarnos las castañas. Hitman se despide con un escenario bien elaborado, visualmente impactante gracias a la situación, el estilo artístico, por la arquitectura que presenta y por el más que notable nivel técnico que sigue mostrando gracias al motor Glacier.

Fin a la primera temporada

Pues sí, la primera temporada de Hitman ya ha llegado a su fin y no podemos más que dar las gracias por la notable entrega que nos ha brindado el equipo de Io Interactive. El Episodio VI de Hitman ha puesto el  broche de oro esperado a una entrega que, debido a su concepto episódico, ha sido criticada. Es cierto que todos (me incluyo) nos esperábamos un juego completo al igual que anteriores entregas. No obstante los episodios lanzados, el contenido incluido en cada uno de ellos y la opción de poder explotarlos al 100% sin prisas ha sido un gran acierto por parte de Io Interactive. El tiempo otorgado entre episodio y episodio nos ha permitido poder sacarle todo el jugo a Hitman y sus diferentes opciones de juego. Si por un casual no os gusta este formato, enero de 2017 llegará la versión en físico de Hitman, la cual incluye todos los episodios (extras de verano también) y el contenido lanzado a lo largo de estos ocho meses.