Probando Nintendo Labo: Ingenio, tecnología e imaginación

Nintendo Labo

Así ha sido nuestra experiencia con Nintendo Labo

Nintendo Labo es un homenaje a la propia historia de Nintendo como compañía durante sus más de 100 años de historia; eso es algo que se percibe tras varios minutos soltanto estrés mientras montamos cualquiera de los peculiares Toy-Con. Desde sus inicios en el negocio de los naipes, pasando por su etapa como importante juguetera en Japón hasta su boom como compañía de videojuegos; todo ello está condensado en unas pocas láminas de cartón, varios minijuegos sencillos y sobre todo, toda la tecnología que incluyen los JoyCon de Nintendo Switch, a los que este ingenioso invento exprime al máximo.

Tras una sesión de prueba extensiva en el taller de manualidades de Nintendo Labo, hemos podido sacar muchas conclusiones, que incluso van más allá de lo que teníamos en mente tras la presentación en sociedad de esta nueva propuesta. Nintendo Labo no es para todos los públicos, tampoco parece ser para todo tipo de niños, pero tiene un grandísimo potencial como regalo estrella para los próximos meses y las razones son muchas. Lo cierto es que entre todos los procesos creación y descubrimiento que nos propone Nintendo Labo, es difícil no encontrarnos cómodos con alguno de ellos, bien sea montando los Toy-Con, haciendo uso de ellos junto con el software de Nintendo Switch o ideando nuestras propias utilidades.

Crea: Dando forma a los Toy-Con

El primer paso con Nintendo Labo es disfrutar montando los Toy-Con, que no son otra cosa que creaciones de cartón predefinidas en láminas troqueladas, muy fáciles de separar y que tenemos que montar gracias a prácticos tutoriales en vídeo incluidos en el software para Nintendo Switch. Cada Toy-Con consta de varias cartulinas y todas las piezas que necesitamos las iremos dando forma de forma exclusiva con cartón, a excepción de algún que otro remache de plástico y alguna goma elástica. 

La duración de este proceso de montaje es totalmente variable, así que para empezar, como hicimos nosotros, lo mejor es optar primero por el antenauta, que lleva unos 15 minutos de trabajo. Es el Toy-Con más sencillo de Nintendo Labo, ya que consta de muy pocas piezas y con él una vez montado tendremos nada menos que una unidad teledirigida que impulsaremos con la vibración de los Joy-Con de Nintendo Switch; un comienzo prometedor. Una vez montado, como sucede con todos los Joy-Con, podemos personalizarlo a nuestro gusto con rotuladores o con pegatinas (cada kit incluye láminas de personalización).

Como decimos, el antenauta es la creación más sencilla, sin embargo el kit variado de Nintendo Labo incluye además láminas para que podamos construir los controles de una moto, una casa en miniatura, una caña de pescar y un piano, éste último el Joy-Con del kit que más tiempo nos llevará construir. Dejando de lado el antenauta, calculad más de una hora y media de montaje para la moto, la casa y la caña, mientras que el piano se puede ir fácilmente a las 4 o 5 horas de trabajo.

Se necesita paciencia, pero el montaje está al alcance de cualquiera; no se necesita pegamento o tijeras, todas las piezas de cartón van ensambladas y están troqueladas para doblarlas fácilmente y es muy satisfactorio ver cómo van tomando forma nuestras creaciones con el paso del tiempo. ¿Terminado el proceso de montaje? Ahora es momento de usarlas como interfaz de control de nuestra Nintendo Switch.

Juega: Sacándole partido a Nintendo Labo

Tras la experiencia de montar nuestros propios juguetes y personalizarlos llega la hora de sacarles todo el partido junto a Nintendo Switch, cuyo software, además de ayudarnos con el tutorial de montaje, incluye minijuegos para sacarle todo el partido a los inventos que acabamos de dar forma. En este momento es cuando nos damos cuenta de lo ingenioso de los Toy-Con y el derroche de imaginación que ha invertido Nintendo en ellos; parece mentira, pero la ingeniería a pequeña escala de la que hace gala Nintendo Labo consigue que podamos recoger sedal con nuestra caña de pescar como si fuera real, acelerar como si tuvieramos el puño de una moto en la mano o sentir los contrapesos de las teclas del piano.

Pese a dejarnos trastear durante horas con los Toy-Con del kit variado y quedarnos enamorados del piano y sus aplicaciones como sintetizador (sí, has oído bien, el software incluido te permite usarlo como un instrumento musical), en Nintendo han dejado para el final lo mejor. La verdadera joya de la corona de esta primera línea de Toy-Con de Nintendo Labo es el kit robot, la única creación que se vende por separado, algo que justifica la gran cantidad de láminas que requiere su montaje -de hasta 8 horas- y los accesorios que contiene. 

El kit robot -que no pudimos montar in situ por razones obvias, pero sí probar- nos permite dar forma a una mochila con contrapesos en su interior conectados a varias cuerdas que ataremos a nuestros pies y sujetaremos en nuestras manos para convertirnos en todo un mecha. Sin duda es a años luz el Toy-Con más complejo de todos, y todo un invento por parte del equipo de Nintendo Labo, lo que para al menos nosotros sí justifica su venta por separado

Como si de realidad virtual se tratase, con estos controles tan pecualiares nos introduciremos en un simulador arcade que resucita el Project Giant Robot para Wii U de Miyamoto, pudiendo golpear los edificios con nuestros brazos, girarnos o caminar moviendo nuestras piernas, además de convertirnos en coches si nos agachamos. Cada movimiento queda registrado por los pesos de nuestro mochila y lo cierto es que se ven representados en pantalla con bastante precisión y fiabilidad. Por si fuera poco, en nuestra cabeza tendremos fijado un visor de cartón con un segundo Joy-Con acoplado; si lo bajamos entraremos en modo primera persona. 

Nintendo Labo

Pero ¿cómo es capaz la tecnología de Nintendo Labo de detectar los movimientos de los Toy-Con, su posición o su inclinación si en todo momento hablamos de piezas de cartón? Sencillamente, todo lo que hace falta se encuentra dentro de los Joy-Con de Nintendo Switch, que Nintendo Labo exprime al máximo. Nintendo Switch e interpreta cada segundo toda la información que le llega del giroscopio, los acelerómetros, la vibración HD y sobre todo, la cámara infrarroja, que interactúa con las pegatinas reflectantes que tendremos que colocar en lugar específicos de los Toy-Con. El resultado son aplicaciones sorprendentes combinando estos juguetes de cartón con los minijuegos de Nintendo Labo, y parece que esto es solo la punta del iceberg de lo que está por llegar.

Descubre: Imaginando nuestros propios juguetes en el Taller Toy-Con

Una vez pasada la fase de creación de los Toy-Con y la fase de descubrir sus aplicaciones, Nintendo Labo ofrece a los jugadores una tercera capa de profundidad, que no es para todo el mundo, pero que seguramente sirva para contentar a los fans del "hazlo tú mismo". Nintendo Labo incluye un software específico de creación para que la comunidad pueda dar rienda suelta a su imaginación y "programar" las acciones y reacciones de los Toy-Con. Podremos definir multitud de parámetros a través de un sencillo interfaz gráfico de entradas y salidas para el que no hace falta saber programar, con toda la tecnología de los JoyCon y Nintendo Switch bajo nuestro control: acelerómetro, giroscopio, infrarrojos, vibración, pantalla táctil, botones físicos... 

Esta capa de Nintendo Labo no es para todos los públicos, pero sí es un añadido interesante, una herramienta muy potente que seguro impulsará a la comunidad a crear sus propias invenciones (sorprendiéndonos incluso más que las de la propia Nintendo). Todavía está por ver las posibilidades que tendrá Nintendo Labo para compartir estas creaciones online, como ya ocurriera con Super Mario Maker en Wii U, pero lo cierto es que tendría todo el sentido del mundo. Quizás la mejor forma de entender las posibilidades de creación que tiene el Taller Toy-Con es echarle un vistazo a los vídeos oficiales de Nintendo Labo que tienes más abajo.

Nintendo Labo: Nuestras conclusiones

Tras quedarnos a cuadros en la presentación en vídeo de hace algunas semanas, nos llevamos una grata sorpresa con Nintendo Labo tras haberlo probado con tranquilidad y de forma profunda. Es un producto especial, que pide a gritos ser probado antes de comprarlo, para entenderlo bien y comprender la dimensión de lo que nos ofrece. No es para todos los públicos; pero es obvio que el público al que sí que va dirigido lo va a disfrutar enormemente.

Nintendo Labo es una herramienta muy potente para estimular la imaginación y creatividad, tanto de pequeños como de mayores, pero lógicamente requiere paciencia; no todos estarán dispuestos a invertir 8 horas en montar el kit robot. Si te ves atraido por las manualidades, la personalización o incluso la ingeniería, seguro que va a cumplir tus expectativas. 

Nintendo Labo llegará el próximo 27 de abril a España, comercializándose a través de dos packs que incluyen el software necesario: el kit variado (con cinco Toy-Con), que costará 69 € y el kit robot (incluye la mochila) y que costará 79€. Además de los kits, se venderán por separado (unos 10 €) sets de personalización con láminas, pegatinas y cintas adhesivas reflectantes.