Dragon Age: Inquisition

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Vuelta a los orígenes de Dragon Age

Electronic Arts nos ha permitido en la Gamescom 2014 volver a acercarnos a 'Dragon Age: Inquisition' y a su mejorado aspecto gráfico y jugable

15/08/2014 22:38
'Dragon Age: Inquisition' es uno de los títulos que abrieron la conferencia de Electronic Arts en la Gamescom 2014 y que desde su anuncio por parte de Bioware se ha convertido en uno de los títulos más esperados para consolas y PC. La compañía ha elegido la feria alemana para mostrar en profundidad el sistema de personalización de los héroes así como ahondar en el sistema de combate, el cual vuelve a los orígenes de la franquicia en este nuevo capítulo.
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Al igual que en 'Dragon Age: Origins' podremos crear un personaje eligiendo entre diferentes razas; modificando el pelo y facciones de nuestra cara entre otra cantidad de detalles que siempre gustan a los aficionados al rol con el fin de crear su 'inquisidor', nombre con el que nos conocerán los habitantes de Thedas. Además de modificar el aspecto físico del protagonista también podremos alterar diferentes parámetros del juego que enfatizan aún más el apartado personalizable del título. Hablamos de la creación de armas mediante diferentes materiales y por consiguiente engarzar todo tipo elementos con los que generar daño extra en los enemigos.

Como buen RPG, 'Dragon Age: Inquisition' nos ofrece el subir de nivel a los diferentes integrantes de nuestro grupo, además del protagonista por supuesto. Más allá de los clásicos atributos como 'Fuerza', 'Destreza' o 'Vigor' (cada uno con su propia función); las habilidades también serán clave para llevar a buen puerto los protagonistas. Éstas quedarán divididas según la clase de cada uno de los personajes; el mago tendrá acceso a una amplia variedad de hechizos separadas en varias escuelas o especializaciones, mientras que el guerrero podrá centrarse por ejemplo en habilidades de daño con armas a dos manos u otras centradas en ejercer el rol de 'tanque'. En este aspecto, 'Dragon Age: Inquisition' bebe directamente de la segunda entrega numerada de la marca en lo que a la utilización de menús se refiere; todos ellos muy sencillos y bien diferenciados.

Nos sorprendió el gran acabado del título gracias a la utilización del motor Frostbite 3

Durante la demo pudimos ver una de las incontables misiones a las que asistiremos en el juego final y que en esta ocasión se centraba en el asalto a un castillo. Antes de ello, y situados en nuestra fortaleza, podremos escoger no solo la opción de viaje rápido desde el mapa del mundo de Thedas; sino también elegir quienes nos acompañarán en la cruzada. Una vez en la zona nos sorprendió el gran acabado del título gracias a la utilización del motor Frostbite 3. La vegetación, iluminación y nivel de detalle de texturas está a un gran nivel, logrando una ambientación única en el género; obviamente en plataformas de nueva generación (PlayStation 4 y Xbox One) y PC, siendo PlayStation 3 y Xbox 360 las peor paradas en este aspecto.

Dragon Age: Inquisition

'Dragon Age: Inquisition' bebe directamente de la segunda entrega

El sistema de combate de 'Dragon Age: Inquisition' contentará tanto a los usuarios que disfrutaron de 'Origins' como a los que hicieron lo propio con la segunda entrega. En este aspecto el PC se sitúa como plataforma más cómoda a la hora de interactuar con ambas opciones, tanto por los accesos directos que podremos personalizar a nuestro gusto a la vez que por el movimiento de la cámara con el ratón. No obstante, el pad también es una variante más que válida y que desde Bioware se han esmerado para ofrecer la mayor comodidad para el jugador. La perspectiva cenital propia de títulos del estilo 'Baldur's Gate' y otra en tercera persona con la que viviremos más de cerca los enfrentamientos nos han planteado dos maneras diferentes de abordar los combates.

La cámara situada a la espalda de nuestro personaje está más enfocada a la acción

La primera de ellas, la cenital, es la más estratégica y por ende la más sencilla a la hora de ofrecernos la opción de dar órdenes a nuestro grupo; gracias a ella además tendremos una vista general del campo de batalla, algo que sin duda es de agradecer. Por otro lado, la cámara situada a la espalda de nuestro personaje está más enfocada a la acción, jugando en este caso a que confiemos en la IA de los compañeros; aún así, siempre podremos recurrir a ponernos en la piel de alguno de ellos, pasando a controlarlos de la misma manera que al protagonista.

Cada misión secundaria tendrá repercusión en el mundo de 'Dragon Age: Inquisition'. A la que pudimos asistir, además de conseguir equipo para el héroe y su grupo, logramos hacernos con la confianza de uno de los NPCs prisioneros en el castillo y que por supuesto no dudo en unirse a nuestra causa. En este aspecto, el sistema de diálogo vuelve a apostar por la clásica rueda que ya hemos visto en títulos como 'Mass Effect' o 'Dragon Age 2'.

Dragon Age: Inquisition

Supone el regreso por todo lo alto de la marca que encandiló a millones de jugadores

'Dragon Age: Inquisition' supone, ahora sí, el regreso por todo lo alto de la marca que encandiló a millones de jugadores con 'Origins'. Un sistema de combate totalmente personalizable para el jugador, ya sea desde el punto de vista estratégico o con algo más de acción, pero en ambos casos optando por el desafío y en el que pensar antes de actuar será clave. Un apartado técnico abanderado por Frostbite 3 que recrea Thedas y sus diferentes regiones como nunca antes habíamos imaginado; y por supuesto una historia que promete tenernos pegados a la pantalla durante más de 70 horas. Un viaje en el que viejos conocidos se volverán a dar cita, nuevos aliados y peligros además de  una trama que girará en torno a nuestro protagonista serán el santo y seña del título.

Podemos asegurar que 'Dragon Age: Inquisition' que, tras lo visto en la Gamescom 2014, tiene muchas probabilidades de convertirse en todo un imprescindible para los amantes del género del RPG.