Análisis Dishonored - : Definitive Edition

(PS4, One)

Estás en: JuegosAdn > PS4 > Análisis > Dishonored : Definitive Edition (PS4, Xbox One)

Corvo busca venganza

Tras pasar tres años desde su estreno en Xbox 360, PlayStation 3 y PC; Arkane Studios nos devuelve a Dunwall pero esta vez para la actual generación de consolas

Plataforma analizada: Xbox One
28/08/2015 16:00
Hasta la llegada de 'Dishonored 2', nada mejor que rememorar las aventuras de Corvo Atano y Daud. 'Dishonored' fue, con acierto y sin ningún tipo de dudas, uno de los grandes tapados en su momento. No obstante, eso no impidió que la obra de Arkane Studios se convirtiera en todo un referente de su género, siendo además uno de los mejores juegos de la pasada generación. Toca volver a enfundarnos la máscara, clamar venganza y liberar - o no - a Dunwall de su corrupto sistema opresor; eso sí, ahora en 1080p y luciendo todo más bonito

El “sleeper” de 2012

2012 fue uno de los años más fructíferos de la industria en lo que a lanzamientos se refiere. A la llegada al mercado de la actual consola de Nintendo, WiiU, había que sumar títulos para Xbox 360, PlayStation 3 y PC del calibre de ‘Mass Effect 3’ – cerrando así la trilogía de Shepard - , el adictivo y exitoso ‘Borderlands 2’, ‘Max Payne 3’, el bello ‘Journey’ o  el sobresaliente ‘Far Cry 3’ entre otros muchos juegos que nos tuvieron ocupados durante meses. Entre todos ellos hubo una gran sorpresa, una obra con la que nadie contaba y que para muchos se convirtió en lo mejor de 2012: ‘Dishonored’.

La maestría con la que se desarrollan las misiones, los diferentes personajes y el mimo y cariño puesto en el apartado artístico fueron clave en su éxito

Arkane Studios nos propuso una aventura y cuya trama estaba centrada en la venganza por parte de Corvo Atano, protector de la emperatriz y que había sido injustamente acusado del asesinato de ésta. Una historia en la que si bien a priori puede parecer que no se inventa la rueda, la maestría con la que se desarrollan las misiones, los diferentes personajes y en especial el mimo y cariño puesto en el apartado artístico fueron detalles con los que, cuando queríamos ser conscientes de ellos, ya era tarde: estamos totalmente enganchados a ‘Dishonored’.

El apartado jugable tampoco se quedaba atrás, es más, es aquí donde realmente sobresalía el título de los que en su día desarrollaran el notable ‘Dark Messiah’ – otro título que pasó por cierto desapercibido en su momento -. Acción o sigilo. Tú elegías la forma en la que afrontar la historia de Corvo, además aderezando la jugabilidad con cierta toma de decisiones que repercutirían en el resultado final del argumento. Aquí no termina la cosa, la implementación del sistema de movernos entre las sombras, la utilización de los poderes que enfatizaban dicha faceta y los correspondientes útiles como la ballesta, nos dejaban un sabor de boca más que satisfactorio si nos decantábamos por el sigilo; algo así como un ‘Thief’, pero mucho más ágil y en cierta manera directo.

Dishonored

Por el contrario el jugador que se enfrascaba en el título por el lema de “patada en la puerta”, llevando a la acción de la mano se encontraba con un juego igual de divertido, una mezcla entre ‘Bioshock’ y ‘Half-Life’. El uso de poderes como ralentizar el tiempo, desplegar un ejército de ratas o emplear la pistola eran algunas de las mecánicas a seguir para demostrar una cosa que Arkane Studios supo hacer a la perfección: ‘Dishonored’ podía ser jugado de diferentes maneras, ¿Lo mejor? Todas ellas funcionaban a las mil maravillas, logrando con ello una rejugabilidad pocas veces vista.

Tras su lanzamiento, y con el fin de ampliar el ya de por sí más que atractivo trasfondo de la obra, el estudio nos obsequió con varios DLC. Uno de ellos, ‘Dunwall Trials’ centrado por completo en desafíos que estaban divididos en forma de puzles, enfrentamientos directos en los que eliminar enemigos en diferentes rondas, o bien haciendo uso del sigilo. No fue hasta la llegada de la pequeña trama referente a Daud – uno de los villanos del título – cuando pudimos ampliar con notoriedad las horas de duración de ‘Dishonored’. Nuevos escenarios y una trama a estrenar eran las principales características de estos dos contenidos en los que se nos narraban los hechos anteriores al argumento original.

‘Dishonored’ fue sin lugar a dudas el ejemplo de que las aventuras centradas para un único jugador pueden ser igual de buenas que aquellas que aportan, a veces, un multijugador metido con calzador. Sumando además elementos de la vieja escuela, un apartado artístico de auténtico escándalo y una jugabilidad que generaba adicción gracias a la cierta amplitud de los escenarios en los que descubrir secretos, pero en especial abordar la acción de diferentes formas posibles.

Dishonored

Más port que edición definitiva

Han pasado casi tres años desde el estreno de la obra original, le llega ahora el turno de que los usuarios de Xbox One y PlayStation 4 puedan disfrutar de la ciudad de Dunwall y sus peculiares historias y habitantes. No obstante, y por desgracia, con ‘Dishonored Definitive Edition’ nos encontramos más ante un port que la versión definitiva como reza el nombre del producto.

El apartado gráfico deja claro que el estudio ha cumplido tan solo con los mínimos requeridos para tratar a ‘Dishonored’ como una ‘Definitive Edition’

Arkane Studios ha decidido llevar casi tal cual el juego original a las actuales consolas de Sony y Microsoft; algo de lo que nos damos cuenta ya desde el menú principal, conservando éstos el mismo estilo que la obra de 2012. Además de incluir todo el contenido publicado hasta la fecha, en un primer momento la mejora técnica puede resultar a grandes rasgos la excusa perfecta para rejugar las aventuras de Corvo, pero inclusive el apartado gráfico deja claro que el estudio ha cumplido tan solo con los mínimos requeridos para tratar a ‘Dishonored’ como una ‘Definitive Edition’.

A pesar de que el título llega a resolución de 1080p, sin duda de agradecer y aportando con ello una mayor nitidez a la imagen; la tasa de frames se mantiene a 30fps, una auténtica lástima pues las 60 imágenes por segundo le sientan de auténtica maravilla a la jugabilidad tal y como pudimos comprobar en su día con la versión para PC, y que esperábamos también encontrar en Xbox One y PlayStation 4. No todo van a ser malas noticias. En el plano técnico, ‘Dishonored Definitive Edition’ nos aportará cierta mejora en la iluminación, animaciones y las texturas, que aunque éstas últimas no llegan al nivel de otras remasterizaciones, ofrecen una calidad idéntica a lo visto en compatibles. Este compendio de pequeños cambios visuales, sumado al aumento de resolución, dan como resultado un juego más bello que el original de Xbox 360 y PlayStation 3; aunque quedándose un peldaño por debajo o muy cerca de PC.

Dishonored

PlayStation 4 por otra parte, es sin duda la versión que sale ganando con respecto a la de su máxima competidora. El motivo no es otro que el gran uso que se le ha dado al DualShock 4, pudiendo escuchar la voz del Corazón a través del altavoz del mando; el uso del trackpad para ciertas habilidades de Corvo o bien el uso a distancia gracias a PlayStation Vita.

‘Dishonored Definitive Edition’ es la mejor versión de la obra maestra de Arkane Studios en lo que a consolas se refiere. En ella encontramos la mejora de apartado técnico, así como la inclusión de todo el contenido DLC publicado, extras que no solo aportan un mayor empaque al mundo de Dunwall, sino que resultan increíblemente divertidos y amplían varias horas la obra original. Puede que todavía queden algunos rezagados que no se han lanzado a aventurarse en la trama de Corvo, pero de ser así, ya no tenéis excusa; hablamos de uno de los mejores juegos aparecidos en la pasada generación y por ello de todo un imprescindible. Para el resto de mortales, tal vez ‘Dishonored Definitive Edition’ no tenga los incentivos necesarios para ser una compra obligada, pero si tenemos en cuenta el descuento sobre su precio para aquellos que tengan el juego original en versión digital, y la ligera mejoría técnica,  puede que no esté de más volver a rememorar una de las mejores historias de venganza del sector.

7.5

Lo mejor

Sigue siendo un juego increíble, de lo mejor de la pasada generación

El buen uso que da al DualShock 4

La resolución 1080p le sienta a las mil maravillas a Dunwall...

Lo peor

...aunque tan solo llega a 30fps

Pequeñas y leves mejoras técnicas

Tiempos de carga algo más largos de lo habitual

¿Cómo analizamos?