Análisis Dillon's Rolling Western

Como bien hemos dicho antes, esta mecánica se repetirá durante los tres días de cada nivel. Las únicas diferencias serán el tiempo de la primera fase, que irá recortando su tiempo, así como la aparición de monstruos, que será mucho más masiva durante el tercer día. Una vez acabados, se nos otorgará una puntación de cinco estrellas en función de la realización del nivel. Recibiremos de una a cuatro estrellas en cuanto al tiempo que nos haya llevado derrotar a los monstruos (siempre tendremos como mínimo una), y una quinta estrella si hemos conseguido superar todos los niveles.

Estas estrellas no serán un mero reconocimiento de habilidad en el nivel, sino que se tendrán en cuenta para avanzar en el juego. Podremos acceder a los distintos pueblos si contamos con un mínimo de estrellas bajo nuestros brazos, por lo que si no alcanzamos ese mínimo nos veremos obligados a repetir alguno de los niveles ya superados.

Esta mecánica es bastante simple como puede apreciarse, y en todo momento tendremos conciencia de saber qué tenemos que hacer y cuándo lo tenemos que hacer. Sin embargo, hay que reconocer que el juego en ocasiones peca de ser repetitivo, ya que los niveles son muy parecidos entre sí. Sin embargo, las dificultades propuestas en cada nivel podrían subsanar un tanto este aspecto.

Preparen sus armas y sus púas

Aparte de tener que explorar cada uno de los niveles en búsqueda de objetos, la otra gran baza del juego serán los combates contra los monstruos, que como bien hemos dicho antes, podrán ser cuerpo a cuerpo o relegados a las torres de artillería.

El combate cuerpo a cuerpo comenzará nada más acercarnos a un monstruo. Entraremos entonces en un recuadro limitado, con nuestros enemigos dispersados por él. Mediante el stick de control y la pantalla táctil, podremos realizar una serie de acciones para debilitarlos. La acción básica aquí sera Rodar, convirtiendo a Dillon en una esfera al más puro estilo Sonic, y deslizándolo hacia los enemigos, apuntando siempre con el puntero táctil. Una vez alcanzado el enemigo, si el impacto no le ha derrotado, podremos realizar dos acciones: por un lado Rasgar, acción que se lleva a cabo dando toques en la pantalla, y mediante la que Dillon utilizará sus garras para atacar a los enemigos; y por otro lado Rallar, en la que con nuestra forma esférica, continuaremos rodando sobre el enemigo. Rasgar será más potente que Rallar, pero como contrapunto, Rallar nos premiará con más objetos y rocas que el enemigo pueda ir soltando.

Iremos encadenado combos según atacamos a los enemigos

Todas estas acciones se pueden realizar unas tras otras, lo que nos permitará encadenarlas en forma de combos. Estos combos nos darán pequeñas cantidades de dinero al alcanzar un número de ellas, o en otras ocasiones serán solicitadas en forma de misión secundaria. Además, estas acciones podrán mejorarse con el equipo que podremos ir incorporando. Estas mejoras radican básicamente en un mayor número de arañazos o de su potencia, un mayor tiempo de uso de Rallar, etc.

El otro gran punto de las batallas serán las torres de artillería. Estas torres estarán construidas de madera, de metal o de acero, que serán indicadores de su resistencia frente a ataques de monstruos. Por supuesto, cuanto más resistente queramos hacer una torre, más dinero tendremos que desembolsar. Hay que indicar de todas maneras, que pese a tener unas diferencias de precio, los monstruos suelen tardar bastante tiempo en destruirlas. El suficiente tiempo para poder acercarnos y acabar con el monstruo antes de que este cumpla con su cometido.

Estas torres de artillería además pueden ir equipadas con una escopeta, un gatling o un cañón. De la misma forma que los materiales, unos costarán más que otros, un precio que se compensará con el alcance que tendrán estas armas. El de la escopeta será muy reducido, mientras que el cañón llegará bastante lejos. Sin embargo, no podremos decidir la orientación de estos, vendrán ya predefinidos. En la mayoría de las ocasiones su alcance estará bastante acertado, pero no habría estado de más poder elegir de una forma más exacta hacia donde queremos que se dispare.

Breve mención debemos de hacer aquí a las torres de vigilancia. A diferencia de las torres de artillería, estas no poseen armas, pero nos servirán para saber dónde se encuentran los enemigos y ver su localización en el mapa. Aunque en los primeros niveles su utilidad será prácticamente nula, según avancemos su utilidad será clave a la hora de plantear una estrategia.

Sobre los enemigos del juego, los tendremos de todos los tipos y formas. Tendremos los más básicos, unos pequeños monstruos de piedras que en unos pocos golpes serán derrotados, pero según avancemos en el juego nos encontraremos distintos enemigos sobre los que habrá que actuar de una forma u otra para acabar con ellos. También aparecerán algunos "jefes", que serán más costosos de derrotar y contarán con una serie de añadidos: algunos tendrán la posibilidad de escapar, otros si no son derrotados en un tiempo determinado destruirán todas las torres...