Análisis Dead Space: Extraction

Presentación

Aprovechando que Move forma parte de la familia de hardware de PS3 la consola recibe Dead Space Extration, remasterizado en HD y con total compatibilidad con el mando de control de la consola de Sony. Para adquirirla tendréis dos opciones, comprar la edición coleccionista en la cual el juego viene incluido en el Blu Ray o descargarla de PSN por un precio de unos 14 Euros. Hoy os analizaremos este juego para abriros boca de cara al análisis de Dead Space 2 que llegará en breve, adentrémonos en el oscuro mundo de los Necromorfos, echémosle un vistazo a Dead Space Extraction.

Historia

La historia de Extraction nos meterá de lleno en el planeta del que procede el conocido monolito, hablamos de Aegis VII, en la primera parte del juego (que nos situará cronológicamente en lo que pasó antes del primer Dead Space) encarnaremos a Sam Caldwell uno de los muchos mineros que trabajan en el inhóspito planeta y que junto a un grupo de amigos tienen la misión de transportar un extraño monolito encontrado en las excavaciones del planeta.

Mientras transportáis el monolito conversas con los compañeros que te comentan que al igual que tu ellos han tenido nauseas e incluso extrañas visiones desde que comenzaron las tareas de transporte del extraño objeto. Algunos lo achacan al estrés laboral y otros a las extrañas condiciones atmosféricas del planeta pero tras un suceso algo inesperado la cosa se convierte en una autentica pesadilla.

La historia nos meterá en la piel de varios protagonistas ya que la aventura abarca varios puntos de vista, primero estaremos dentro de Sam para después encarnar a uno de los miembros de seguridad del USS Ishimura. Poco a poco observaremos como el supuesto virus invade a todos los ciudadanos de Aegis y tripulantes del Ishimura y como lentamente mutan en extrañas criaturas.

Los que hayáis jugado a Dead Space ya podréis intuir el final de este título sobre todo al tratarse de la precuela del primer juego de esta saga creado por Visceral Games. Pero lo cierto es que pese a saber que les espera a los protagonistas el juego nos sorprende en muchos aspectos. La historia bien narrada y encajada y los momentos épicos son solo algunos de los puntos positivos del juego.

Jugabilidad

A nivel jugable Dead Space Extractión es un puro shooter sobre raíles. El juego se encargará de controlar la cámara (excepto en algunos momentos puntuales donde nosotros podremos moverla temporalmente) y de mostrarnos los momentos mas épicos o mas terroríficos. Nuestra misión será apuntar y disparar a todo bicho viviente que se cruce en nuestro camino. Durante la aventura seremos parte de la batalla y también presenciaremos momentos épicos que nos dejarán sin aliento.

Nada mas comenzar deberemos de ajustar el control de Move al juego. Lo cierto es que el funcionamiento del dispositivo en el título es mejor de lo que me esperaba superando incluso al de Wii. No obstante la calibración de este es algo tosca y para poder calibrarlo con exactitud hubo que hacer varias pruebas, no obstante una vez terminadas estas calibraciones todo va como la seda.

El sistema de juego es simple como os hemos comentado, apuntar y disparar a todo lo que veas, también durante la aventura podremos utilizar todos y cada uno de los elementos aparecidos en la primera entrega añadiéndose otros como por ejemplo linternas que deberemos agitar para poder visualizar nuestro camino.

El elenco de armamento y características es similar a lo encontrado en Dead Space, la mayoría de las armas que aparecen en la primera entrega hacen acto de presencia incluso los poderes de telekinesis que nos permiten acercar objetos alejados para romperlos y recoger sus contenidos.

El armamento del que disponemos podrá ser mejorado por medio de ítems que encontraremos en la aventura aumentando su capacidad de fuego o el numero de disparos que tendremos en la recamara.

No obstante hemos encontrado algunas dificultades en el control que hacen algo toscos algunos momentos del juego. Por ejemplo la utilización de los botones secundarios para recargar o acceder al arma secundaria para defendernos cuerpo a cuerpo.