[Avance] Tom Clancy's - The Division

Nueva generación por los cuatro costados

Como decíamos, 'The Division' ofrece capacidades a las que no estamos acostumbrados, y que pueden darnos indicaciones sobre las cosas que van a mejorarse en la próxima generación. Una de ellas será, obviamente el aspecto gráfico, que aquí luce como pocos títulos hasta la fecha. El motor gráfico Snowdrop ofrece uno de los aspectos técnicos más logrados de todos los que vimos en la feria, y todo ello sin cargas durante la acción, ni tan siquiera cuando entremos o salgamos de los edificios o cuando iniciemos las refriegas. Todo luce fluido y a un nivel que nos sorprende.

Nos sorprende, obviamente, por el cambio generacional; probablemente a medida que vayan pasando los meses veremos juegos con un apartado gráfico igual o mejor que 'The Division'. Pero sin duda, este es uno de los primeros proyectos en los que realmente se nota un cambio importante en las nuevas consolas. Los modelados son geniales, y las físicas son más realistas que nunca. Veremos neumáticos deshincharse por nuestros disparos, cristales hacerse añicos de forma muy real y, en definitiva, comprobaremos como todos los elementos sufren cambios por nuestros ataques.

Las animaciones de los personajes van a la par. Todos los movimientos son increíblemente reales, desde moverse por las coberturas, caminar, correr o apartar con la mano objetos que nos molesten. Acompañan por lo tanto al fotorealismo del resto del apartado técnico, dando la sensación de que lo que vemos en pantalla es real como la vida misma. Los efectos de partículas, explosiones y demás alcanzan un nivel soberbio, sorprendiendo mucho al jugador en esta primera toma de contacto.

Donde quizás gana más puntos este título gráficamente hablando, y donde se nota el toque de nueva generación, es en la iluminación. La luz parece un elemento sacado de la misma vida real, con los efectos que la acompañan. En la demostración, por ejemplo, se aprecia al protagonista disparar a un cartel situado sobre la comisaría que atacan. La luz del sol se filtra por estos agujeros, creando un haz diminuto que deja entrever las motas de polvo en el aire, tal cual lo haría en la vida real.

Pero la nueva generación no van a ser únicamente gráficos; también será capacidad de recrear grandes escenarios sin cargas y con conexión permanente a otros jugadores a través de internet. Nueva York será orgánica y llena de vida, tanto de bots scriptados por la desarrolladora como otros jugadores que están conectados a la vez que nosotros. La capacidad de las nuevas consolas será capaz de mantener con vida este mundo en la nube, y estabilizarlo para que entremos solos o acompañados cuando deseemos. Los mundos vivos que se podrán crear hacen soñar a muchos.

El juego se centra en el apartado multijugador, algo que parece que va a cobrar especial importancia a la nueva generación. Internet va a estar más presente que nunca, pero también las nuevas tecnologías. Ello queda patente en la conectividad del juego con tablets y smartphones, gracias a los cuáles un cuarto jugador podrá unirse a la partida y hacer labores de apoyo a quienes juegan desde las consolas de sobremesa.