Presentación del videojuego de Grease, bailando al ritmo de los setenta

Anne-Sophie se une a la conversación y entre los dos me cuentan que Cooking Mama es la franquicia más vendida en las consolas Nintendo después de las de la propia N. Mientras me lo cuentan veo un brillito en los ojos de Anne-Sophie como el de Mama en las portadas de NDS. Bueno, toca volver al trabajo. Pedí un par de horas para poder venir a esta presentación y no ha estado mal. ¿Quejas? Un par de stands para poder jugar al juego hubiera sido perfecto porque probarlo delante de todos hace que muchos se corten, pero lo compensan con una copia del mismo acompañando al dossier de prensa. En un par de semanas espero tener un análisis. Lo se, no es Metroid, ni Mario, ni Resident pero voy a dar una oportunidad al juego. Eso sí, no lo haré solo, llamaré a dos o tres amigos porque tiene pinta de ser de esos juegos que sólo como que te das a ti mismo un poco de vergüenza ajena, jugando en el salón de casa en pijama no lo veo yo.

Quería compartir mi primer experiencia para Blogocio con vosotros, aunque no sea la presentación del año –para esos están mis compañeros a lo Willy Fog que van a Alemania y Japón-, ni el videojuego que todos queremos pero hay que empezar poco a poco, ¿no? Al menos espero no haberos aburrido y ya que habéis llegado hasta el final, como agradecimiento, os digo que lo nuevo de Cooking Mama para Wii lleva un peluche al que hay que meter el Wiimote por… sí, más o menos por donde estáis pensando. Y como decían en la película de Grease: “¿Gafas nuevas? Sí, ¿me quedan bien? No, aún se te ve la cara…” No tiene nada que ver pero es que he visto la película al menos “diquitidós” veces -como decía el abuelo de los Simpsons- y eso significa muchas más veces que Anne-Sophie. ¡Hasta la próxima!